La estrella del tenis de mesa de Puerto Rico, Adriana Díaz, clasificada número 11 en el ránking mundial del World Table Tennis, ganó la medalla de oro en el torneo femenino individual de los Juegos Panamericanos Santiago 2023 después de derrotar por 4-3 a la brasileña Bruna Takahashi, número 23 del ránking mundial.
De esta manera, Díaz volvió a repetir lo hecho en Lima 2019, cuando se colgó el oro tras derrotar a la estadounidense Jennifer Wu.
Díaz se recuperó de una desventaja de 3-2 en los parciales y se impuso finalmente en un final apasionante por 9-11, 14-12, 11-3, 8-11, 8-11, 11-9 y 11-7.
Así, la atleta puertorriqueña, que participó en los Juegos Olímpicos de Río 2016 con 15 años y que también estuvo presente en Tokio 2020, sumó su segunda medalla en los Juegos Panamericanos 2023. Anteriormente, se llevó la medalla de bronce en el torneo de dobles femeninos junto a su compatriota y hermana Melanie Díaz.
Y, como si fuera poco, Díaz se transformó en la máxima medallista en Juegos Panamericanos en la historia de Puerto Rico. En total, suma 7 preseas: bronce en equipos femeninos en Toronto 2015, oro en individual femenino, dobles femenino y equipo femenino y bronce en equipos mixto de Lima 2019 y las dos medallas ganadas hasta el momento en Santiago 2023
La final se disputó entre dos potencias del tenis de mesa mundial. Adriana Díaz, colocada en las puertas del Top Ten del mundo, se presentaba como la favorita al oro, aunque Takahashi se mantiene en pleno crecimiento de su carrera.
Ambas se conocían todos los detalles debido a la gran cantidad de veces que se enfrentaron en certámenes continentales. A eso, precísamente, se debió la paridad en el juego durante todo el encuentro.
La brasileña se puso en ventaja en el primer set con un 11-9 ajustado. Díaz, que nunca perdió la compostura, se recuperó en el resultado y se llevó los dos parciales siguientes. Pero en esa montaña rusa de golpes y puntos hizo que Takahashi se pusiera en ventaja por 3-2.
Pero si hay algo que destaca a Adriana Díaz es su mentalidad. Después de ganar el cuarto parcial por 11-9, protagonizó una racha de cinco puntos al hilo para dejar el resultado 10-6 y luego remató el torneo panamericano con un 11-7.
En el final del partido se vio un acto de deportividad hermoso entre las dos finalistas. Takahashi rompió en llanto debido a la impotencia de la derrota y Díaz la abrazó, la consoló y le levantó su brazo como si fuera otra campeona panamericana.
