Las denuncias por violencia sexual en Navarra en lo que va de año superan ya a las de todo 2022

AGRESIONES, ACOSO O SEXTING

Según avanzó en la comparecencia, entre las diferentes violencias sexuales que el Gobierno de Navarra busca reducir o denunciar se incluyen las agresiones sexuales, entendidas como cualquier acto de contenido sexual que se realice empleando violencia, intimidación o abuso de una situación de superioridad, de vulnerabilidad de la víctima o cuando esta tiene anulada por cualquier causa su voluntad.

También el acoso sexual en cualquier ámbito (laboral, en el espacio público, en espacios de ocio, en la esfera deportiva, etc.); la explotación de la prostitución ajena; las violencias sexuales digitales (sexting, sextorsión, grooming o stalking); el acecho con connotación sexual; la mutilación genital femenina; el matrimonio forzado; o la trata con fines de explotación sexual, además del homicidio de mujeres vinculado a la violencia sexual, entre otras.

Consentir algo es decir sí. Las relaciones sexo-afectivas exigen el consentimiento expreso, no vale un baile o una falda. Con esa premisa, el Gobierno de Navarra lanza estos días la campaña institucional ‘Violencias sexuales. Están ocurriendo ahora’ en castellano, con versión en euskera, con materiales gráficos y audiovisuales, donde aparecen mujeres en entornos lúdicos o festivos, que trasladan los siguientes mensajes: ‘Es un Whatsapp. No es un sí’, ‘Es un baile. No es un sí’, ‘Es una copa. No es un sí’ o ‘Es una falda. No es un sí’. “En todas estas situaciones, que se dan en innumerables ocasiones a diario, se pasa por alto el consentimiento de las mujeres, se ningunean sus deseos y expectativas; y, muchas veces, un hombre acaba imponiendo sus deseos y agrediéndolas, agrediéndonos”, criticó Patricia Abad (INAI), que explicó que el objetivo de los carteles y vídeos de la campaña es trasladar el mensaje de que “todo aquel acto de carácter sexual que no se realice con el consentimiento libre de las mujeres, es violencia sexual”. “Es decir, solo sí es sí”.

La campaña reivindica “la libertad de las mujeres para relacionarse con su entorno de la manera que deseen, sin que un gesto o una determinada forma de vestir o actuar pueda ser interpretada como consentimiento para establecer vínculos que no desean”.

La campaña institucional tiene un coste de 50.000 euros. El Ejecutivo foral repartirá cerca de 5.000 carteles en puntos de atención y servicio a la ciudadanía (ayuntamientos, centros sanitarios, bibliotecas, servicios sociales, instalaciones deportivas, juveniles, etc.). Además, emitirá cuñas en radios generalistas, un spot en Navarra TV y en televisiones locales, e insertará publicidad en periódicos en papel y digitales. También difundirá la campaña a través de marquesinas y en redes sociales.