En un intenso partido, Inglaterra derrotó a Argentina por 26-23 y se quedó con el bronce en el mundial de Francia. Los Pumas no pudieron replicar su tercer lugar de 2007.
En un partido áspero y muy parejo, los trasandinos vendieron cara la derrota ante una selección de la Rosa a la que no le sobró nada.
Los británicos arrancaron marcando territorio en el Stade de France de París. A los 3 minutos, el capitán inglés Owen Farrell abrió la cuenta con un penal.
Cinco minutos más tarde, cayó el primer try del partido. Con Inglaterra instalado en territorio argentino, una gran gestión del hooker Theo Dan le abrió el espacio por afuera a Farrell y Marcus Smith, quienes manejaron el balón para que Ben Earl rompa la defensa y anote en la bandera. El capitán inglés sumó la conversión.
Más tarde, Inglaterra volvió a castigar la indisciplina albiceleste con un nuevo penal de Farrell. A los 23, Argentina rompió el cero con un envío a los postes de Emiliano Bofelli para meterse en partido. A 10 del final de la primera parte, la Rosa volvió a estirar la diferencia con el pie.
A los 35 minutos Argentina mostró los dientes. Gran jugada que arranca en mitad de cancha, circulación de pelota y Tomás Cubelli llega a la meta. Bofelli no tuvo problemas con la patada de dos puntos, dejando el parcial 16-10 al cabo de la primera parte.
Los Pumas arrancaron con todo el segundo tiempo. Argentina se instaló en terreno inglés y fue el apretura, Santiago Carreras, quien rompió el tackle de Theo Dan para irse libre al in-goal.
Emiliano Bofelli envió la conversión entre los postes para adelantar a los sudamericanos por primera vez en el partido. 16-17.
Inmediatamente después, respondió Inglaterra. Theo Dan se tomó venganza del apertura trasandino y le tapó un kick de despeje para luego capturar el balón en la meta y apoyar el try que le devolvió el liderato a los europeos. Farrell sumó los extras.
Argentina tomó el control del balón pero no logró terminar de romper la defensa inglesa. A los 50 Bofelli fue a los postes para dejar las cosas 20-23.
Inglaterra mostró experiencia para resistir los embates de los Pumas e incluso aumentó su ventaja a falta de 15 para el cierre. Penal de Owen Farrell, quien estuvo implacable con sus envíos a los postes.
Los trasandinos siguieron buscando y a los 68 volvieron a recortar la diferencia. De larga distancia, Bofelli sumó un nuevo penal.
Los Pumas pusieron a Inglaterra contra las cuerdas durante los últimos 10 minutos. Mateo Carreras lideró los ataques y estuvo cerca en dos oportunidades de llegar al try.
Un momento de alta tensión llegó a los 75. Inglaterra se desesperó en defensa y concedió un penal que pudo haber cambiado las cosas. Nicolás Sánchez tomó la responsabilidad de buscar el empate pero su disparo se fue pegado al primer poste.
En los últimos cinco minutos, Inglaterra logró aguantar en defensa. Argentina buscaba pero sus propias imprecisiones le jugaron en contra. En el cierre, la desesperación llevó a los Pumas a conceder un penal que le permitió a los británicos patear afuera y terminar el partido.
26-23 ganó la selección de la Rosa, que se quedó con el tercer lugar en el mundial de Francia. Los Pumas no lograron replicar su histórico bronce en la Copa Mundial de 2007, que también se jugó en el país galo.
Punto aparte es que este fue el último partido con su selección para muchas figuras de ambos equipos, como Dany Care, Ben Youngs, Tomás Cubelli, Nicolás Sánchez y Agustín Creevy, que cerraron sus carreras internacionales.
