Casemiro (31 años) vive una irregular segunda temporada en el Manchester United. No se trata de una cuestión de rendimiento personal. Siempre que ha estado disponible jugó y demostró liderazgo. Pero el equipo no acaba de arrancar, echando por tierra todo el buen trabajo realizado el curso pasado. Nueve derrotas en 18 partidos que ponen al entrenador, Erik Ten Hag, en una situación comprometida. Por si fuera poco, el brasileño lleva seis partidos de baja por un lesión en el tobillo. Ante este panorama, empieza a plantearse su futuro.
Aunque le queda esta temporada y otras dos de contrato (además de un año opcional), el brasileño contempla opciones de cara a los próximos mercados viendo que el United no acaba de conformar un proyecto ganador con el que seguir compitiendo al máximo nivel por todos los títulos. Y en su cabeza aparece la posibilidad de marcharse a Arabia Saudí. Una aventura en la que competir con algunos excompañeros y firmar un último gran contrato antes de retirarse.
Se trata de una idea que ya ha tratado con su entorno más cercano. La misma ha tomado fuerza en los últimos meses en los que cada día su club se aleja más de la élite. Si lo desea, su llegada a la Saudí Pro League no será un problema. En el país asiático ya conocen sus intenciones y estarían abiertos a realizar una oferta. Su agente, Óscar Ribot, se encargaría de las negociaciones.
El United quiere convencerlo con un gran proyecto
Los red devils también conocen las intenciones de Case. Para nada quieren que se marche. Confían en poder convencerlo de que siga uno o dos años más en Inglaterra y tratar de luchar por recuperar títulos y grandeza. Por ello, trabajan en remodelar el proyecto deportivo con salidas y entradas que apañen la plantilla. Que permitan volver a lo más alto. Por otro lado, la situación no acompaña y comprenden que existe la posibilidad de perderlo. Si llega una buena oferta y el jugador lo solicita, no se opondrán a una salida.
Él tampoco descarta quedarse. Llegó al Manchester United con la idea de seguir triunfando en uno de los clubes más grandes del mundo y, si ve que la situación es favorable, seguirá. Además, no quiere dejar tirado a un equipo que apostó tan fuerte por él.
En el año y tres meses que lleva en el conjunto inglés ha jugado 63 partidos en los que ha marcado 11 goles y ha repartido siete asistencias. Le ha dado tiempo a levantar un título, la Copa de la Liga.
Con Ten Hag, su entrenador, ha tenido algún que otro roce en los últimos tiempos. “Quería más fútbol”, argumentó el neerlandés después de sustituir a su pivote en el descanso de un partido contra el Brentford a principios de octubre. Aún así, ha apostado por él como titular en 11 de los 12 partidos que ha jugado este año y el pasado acabó como uno de los futbolistas más utilizados (53 encuentros).
A sus 31 años, Casemiro repite una situación que guarda ciertas similitudes con la que vivió en el Real Madrid en 2022. Por aquel entonces cambió el blanco por el rojo en búsqueda de nuevos retos y de un contrato claramente mejorado. Ahora, dos años mayor, piensa en dar un paso a un fútbol menos competitivo pero en el que seguir jugando junto a grandes futbolistas. La duda reside en si lo hará en 2024 o le convencerán para seguir en Mánchester alguna temporada más.
