“Antes de ir a la Eurocopa previa a los Juegos Olímpicos estaba en 83 kilos. Hicimos la Eurocopa, fuimos directos a los Juegos y al terminarlos yo le pedí a Unai (Emery) jugar la Supercopa con el Villarreal. Él me quería dar vacaciones, y me dijo: ‘Vale, pero después de esto te vas de vacaciones’. Y me acuerdo que el día previo a la final me subí a la báscula y pesaba 77 kilos y medio. Había perdido 5 kilos y medio en un verano que fue muy exigente“, recuerda Pau Torres (Vila-real, 1997), jugador del Aston Villa, donde se ha vuelto a poner a las órdenes del técnico de Hondarribia. “Cuando me volví a sentar en una charla de equipo frente a Unai pensé: ‘Bufff, yo echaba de menos esto’, que él me hiciera mejorar, que me exigiera más”, asegura.
No son la únicas confesiones en esta entrevista del futbolista que en la temporada 2020-21 se convirtió en el jugador europeo que más minutos disputó: 5.791. El central internacional reconoce que ha hablado con Pedri, convencido de que los problemas físicos que arrastra el futbolista culé se deben a que el canario no hizo el parón al que Emery le obligó. “Si el Barça hubiera decidido darle su tiempo de descanso yo creo que él, a día de hoy, estaría mejor físicamente, porque viene arrastrando lesiones desde ese momento”. Unas fechas en las que asegura que, además, los jugadores que participaron en los Juegos Olímpicos de Tokio estuvieron mal alimentados para la cita. “Eran tres cosas para una ensalada, y comidas y cenas eran lo mismo. A lo mejor sólo había una carne ese día, no teníamos un día de pasta… La alimentación no fue todo lo ideal que necesita un deportista”, afirma el defensa valenciano, que también nos cuenta cómo estuvo cerca de firmar por el Real Madrid ese mismo verano.
¿Qué tal, Pau? ¿Cómo te sientes en esta nueva etapa para ti?
Pues de momento muy bien. Contento con cómo se ha dado el cambio, creo que me he adaptado bien al equipo. Venía con ventaja de conocer al cuerpo técnico, que eso siempre ha sido una de las cosas que valorábamos más el entrar en una liga como la Premier. Aparte del proyecto deportivo que tiene el Aston Villa, fue importante que estuviera Unai a la cabeza, con un cuerpo técnico que yo ya conocía y con el que habíamos conseguido grandes resultados.
Es el técnico con el que más tiempo vas a estar, de momento, en tu carrera profesional, después de los dos años y medio en el Villarreal y ahora en Inglaterra. ¿Cómo se dio su llamada?
Fue cuando logran clasificarse para Europa. Yo quería jugar también en Europa, porque con el Villarreal era algo que estábamos consiguiendo año tras año y que se había vuelto habitual y era algo que el club de mi ciudad me daba. Si yo aceptaba un nuevo reto tenía que estar en Europa. Y venir a una liga como la Premier que, en estos momentos, está un paso por delante de LaLiga, desgraciadamente, porque a mí me encantaría que LaLiga estuviera compitiendo de tú a tú con la Premier.
“Me encantaría que LaLiga estuviera compitiendo de tú a tú con la Premier, pero desafortunadamente no es así, la Premier está un paso por delante”
Jugador del Aston Villa
Mis sensaciones, lo hablaba con mi gente, eran que en Villarreal prácticamente lo habíamos hecho todo, que era difícil el superarnos y sí que es verdad que se podía dar la situación de estar toda mi carrera deportiva en Villarreal, pero bueno, yo buscaba también nuevos retos personales. Yo siempre he sentido el cariño de la familia Roig. Ellos entendían que era bueno también para mí crecer, venir a una liga diferente, fuera de casa, nuevo idioma, el inglés, y al final se da la situación. Sí que me pilló en una época que yo estaba de luna de miel y retrasamos todo un poco porque yo les dije: “Oye, si no se hace nada antes de que yo me vaya, yo me desconecto hasta que vuelva de mi viaje, que esto es sólo una vez en la vida”, y bueno, así lo hicimos.
¿Conseguiste desconectar y disfrutar de la luna de miel o inevitablemente estabas con el runrún?
Bueno, sí que era tema de conversación con mi mujer, pero supimos aislarnos un poquito, desconectar, que también lo necesitábamos después de años sin prácticamente tener esas vacaciones de verano. A la vuelta sí que fue todo muy rápido: hicimos la despedida con el Villarreal y prácticamente al día siguiente ya estaba viajando para Birmingham.
Vamos a desgranar estas dos etapas en tu carrera, por partes. ¿Cómo es tener a Unai Emery de entrenador? ¿Qué te aporta y cómo te hace crecer? ¿Qué te genera para querer estar con él?
La forma que tiene de trabajar, de dedicarse al fútbol, creo que es algo que al jugador le engancha, porque Unai tiene muchas ganas de mejorar constantemente, de trabajar mucho. Yo cuando me volví a sentar, ya como jugador del Aston Villa, en una charla de equipo enfrente de Unai, dentro de mí pensé: “Bufff, yo echaba de menos esto”. Echaba de menos que él me hiciera mejorar, que me exigiera más. Y echaba de menos sus charlas, porque veía delante de mí un entrenador que había venido a un nuevo reto, que él volvía a la Premier y quería demostrar lo que no pudo hacer en el Arsenal. Y creo que lo hizo muy bien la temporada pasada y estamos empezando bien ésta. Creo que es eso, que Unai como entrenador tiene muy claras sus ideas. El que es capaz de seguirle la corriente y su exigencia va a seguir mejorando y el que no, pues se va a quedar en el camino.
“Cuando me volví a sentar en una charla de equipo enfrente de Unai pensé: “Bufff, yo echaba de menos esto”, que él me hiciera mejorar, que me exigiera más”
Jugador del Aston Villa
El grupo lo tiene muy claro y aquí hay muchos jugadores que están en una época que han vivido en el Aston Villa momentos difíciles, que han jugado incluso en Segunda división y les ha llegado un entrenador que les hace ver que este club puede estar compitiendo con los grandes de la liga. Hay muchos jugadores que yo he hablado con ellos, los que más tiempo llevan aquí, como Mc Ginn o Konsa, que son buenos jugadores, que ya tienen 27, 28, 30 años y que les ha llegado un entrenador con mentalidad ganadora que ha contagiado al grupo y eso ha hecho que muchos jugadores quieran seguir aprendiendo día tras día. Esa exigencia se ve en los entrenamientos y en los partidos.
Hace unos días charlábamos también con el propio Unai que nos hablaba de esa exigencia, de cómo está trabajando contigo para conseguir que seas más contundente.
Sí, desde el primer día que hable con él antes de venir él me dijo que su trabajo conmigo era venir aquí, competir en esta liga y quitarme esa etiqueta, que a mí personalmente no me ha hecho daño, pero que siempre he venido arrastrando, de falta de contundencia. Y que ése era su principal trabajo conmigo, el demostrarme a mí mismo y a la gente del fútbol que sí, soy un jugador al que le gusta tener la pelota, pero que viene a una liga de muchos duelos y que es capaz de salir ganador. Eso es lo que siempre hemos ido hablando él y yo. Él es muy exigente conmigo en esa mejora, es el trabajo que tiene conmigo.
“Emery me dijo que su trabajo conmigo era quitarme esa etiqueta que siempre he venido arrastrando de falta de contundencia”
Entrenador del Aston Villa
A mí como defensa me gusta enfrentarme a los mejores delanteros. Cada fin de semana te enfrentas a los mejores, cada partido te exige cosas diferentes. Los delanteros físicamente son muy fuertes y, al final el contactar más a un pequeño o a un grande, el ver que de qué forma te puedes anticipar a ellos, cómo dejarlos en fuera de juego y eliminar jugadas es algo que también trabajamos muy bien con un ayudante de Unai que se llama Rodri. Su palabra es unas ‘triquiñuelas’ para, según qué delantero, poder nosotros como defensa intentar tenerlo lo más incómodo posible durante el partido.
¿Triquiñuelas cómo…?
(Sonríe.) Pues cuando hay alguien muy corpulento intentar que cuando vaya a recibir el balón evitar que te pueda referenciar muy fácil, porque aquí es muy común que un delantero te pueda referenciar y darse la vuelta, y de esa forma ya te evita en un primer momento. Ir diferenciando qué delantero se siente más cómodo de espaldas a la portería, a quién le gusta más el contacto o a quién le gusta tocar y correr… Y, después, ver los desmarques que tienen en ese último tercio del campo y a partir de ahí estar un poco más preparado para lo que pueda venir en el partido.
Tuviste ya un buen trabajo junto a Albiol ante hombres como Lewandowski o Vlahovic en la Champions con el Villarreal. Ahora, tendrás enfrente a jugadores como Haaland. ¿Qué aprendiste de Raúl? Otro futbolista que te dio seguridad. ¿Algún partido en el que te diera algún consejo o tuvierais alguna charla que te marcara?
Raúl ha sido el central con el que más he aprendido, con el que más he jugado. Me vino muy bien en mis inicios en el fútbol profesional tener a Raúl al lado, tanto como compañero como persona. El mundo del fútbol lo conoce y es una persona fantástica, un líder, un compañero muy sano y con el que ha hablado varias veces después de salir de Villarreal.
Me acuerdo cuando fuimos a Múnich, que en casa habíamos ganado y Raúl me cogió y me dijo: “Mira, el fútbol que teníamos que demostrar ya lo demostramos en casa -que fuimos superiores a ellos e incluso pudimos ganar por más ventaja-, pero hoy aquí toca dar seguridad al equipo. Si pasamos esta eliminatoria nadie se va a acordar de si Raúl filtró diez pases o si Pau filtró veinte. O sea, que lo que hay que dar hoy es seguridad y defender a muerte”. Y así lo hicimos. Fue un partido que tuvimos que defender mucho en bloque bajo y la gente se acuerda que el Villarreal pasó, no se acuerda de lo que hicieron los defensas, y eso es buena señal.
¿Esa necesidad que comentábamos de tener mayor contundencia te está exigiendo un trabajo físico específico y algún cambio a nivel de peso, de musculatura?
Sí, mi rutina de entrenamiento en el campo evidentemente la marca el entrenador, pero fuera del campo sí que estoy haciendo más gimnasio del que hacía en Villarreal, de forma obligada. Tengo un plan de fuerza de tren superior. Queremos mejorar en ese aspecto pero que me siga permitiendo ser ágil también en el campo, tampoco queremos formar un tronco que no se pueda mover. En eso estamos, en ir ganando poco a poco masa muscular. He vuelto a recuperar mi peso corporal que perdí en el verano de la Eurocopa y los Juegos Olímpicos. No había vuelto a conseguir estar en ese peso otra vez durante prácticamente una temporada y media.
¿De qué peso hablamos, Pau? ¿Cuánto pesas ahora y cuánto llegaste a pesar, cuántos kilos perdiste?
Pues yo antes de ir a la Eurocopa previa a los Juegos Olímpicos estaba en 83 kilos. Hicimos la Eurocopa, fuimos directos a los Juegos Olímpicos y terminamos los Juegos y yo le pedí a Unai jugar la Supercopa con el Villarreal. Él me quería dar vacaciones, y me dijo: “Vale, pero después de esto te vas de vacaciones”. Y me acuerdo que el día previo a la final me subí a la báscula y pesaba 77 kilos y medio. Había perdido cinco kilos y medio en un verano que fue muy exigente, porque vinimos de una Eurocopa en la que yo tuve participación. En los Juegos Olímpicos jugué todos los minutos y teníamos partido cada dos-tres días y la alimentación que teníamos en Japón tampoco era la mejor para un deportista que tiene que rendir tanto y exigirse tanto físicamente. Ahí perdí muchísimo peso. Yo creo que perdí masa muscular, perdí grasa, perdí de todo. Después de esa Supercopa tuve dos-tres semanas de vacaciones y ya me volví a enganchar con los compañeros sin parar. No tuve tiempo de recuperarme bien y lo llevé arrastrando hasta día de hoy.
Bueno, es que en esta temporada 2020-2021 fuiste el jugador europeo que más minutos disputó: 5.791, además de los penaltis de ese último partido, la Supercopa ante el Chelsea en Belfast.
Sí. Mira, te lo voy a decir porque es algo que he hablado con él. Unai fue muy sincero conmigo, me dijo: “Mira, Pau, yo tengo mucha experiencia, he tenido jugadores internacionales que me han vuelto de Mundiales y han querido jugar, y no. Yo me planto. Me da igual que quieras jugar, tú tienes que tener vacaciones sí o sí porque el jugador necesita descansar”. Volví de los Juegos Olímpicos e hicimos esto, tuve vacaciones después de la Supercopa, y Pedri volvió y empezó la temporada. Simplemente paró una semana, en el primer parón de selecciones, me parece. Creo que, por desgracia, él no ha terminado de recuperarse de ese momento y es algo que él arrastra. Si el Barça hubiera decidido darle su tiempo de descanso yo creo que él, a día de hoy, estaría mejor físicamente, porque viene arrastrando lesiones desde ese momento. Creo que él no está no está disfrutando del fútbol, y el fútbol español tampoco, porque es un jugador diferente que España necesita y que LaLiga necesita. Yo, como compañero suyo y amigo de vivir tantos momentos juntos, es algo que tampoco disfruto, de ver a un compañero que ha vivido situaciones parecidas a las mías y que él no esté pudiendo rendir, sobre todo, por no poder descansar de aquel momento.
“Sólo paró una semana. Si el Barça le hubiera dado su tiempo de descanso, Pedri a día de hoy estaría mejor físicamente”
Jugador del Aston Villa
Dices que lo has hablado con Pedri.
Sí, yo me he puesto en contacto con él porque veía que no enganchaba una dinámica de más de diez partidos jugando y es difícil. No hay que tener prisa. Su cuerpo va a decir cuándo está preparado y ojalá, estoy seguro, que con el trabajo que está haciendo espero que ésta ya sea su última lesión y que sólo le veamos en el campo, que es donde todo el mundo le quiere ver.
¿Por qué decías que la alimentación en los Juegos Olímpicos de Tokio no fue buena? ¿Qué pasó? ¿Era algo vuestro de la Selección o de la organización?
Los atletas dentro de la villa olímpica sí que tienes buffets de todo tipo y si tú eres consciente sí que te puedes ir cuidando. Con el fútbol, en la villa olímpica creo que sólo estuvimos cuatro o cinco noches. Después, íbamos viajando mucho porque cada partido era en una ciudad e ibas a hoteles que te ponía el Comité Olímpico. Ni la Federación de Fútbol decidía ni nadie de España decidía. Era algo que te imponía el Comité Olímpico y el nutricionista que teníamos se preocupaba de que tuviéramos lo mejor, pero si estábamos una semana en el mismo hotel, pues eran tres cosas para una ensalada, y comidas y cenas eran lo mismo. A lo mejor sólo había una carne ese día, no teníamos un día de pasta… Nos teníamos que ir adaptando a lo que teníamos en cada hotel. Intentábamos con la suplementación que llevamos nosotros como Federación Española ir un poco compensando pero, pero la alimentación no fue todo lo ideal que necesita un deportista.
¿Estabais todas las selecciones en las mismas condiciones?
Los del fútbol yo creo que sí, porque viajábamos prácticamente todas las selecciones a distintas sedes y no sé si los del básket estuvieron más veces en la villa olímpica, pero en cuanto al fútbol sí. Es algo que nosotros allí dentro comentábamos un poco ya entre risas: “Pues bueno, otra vez a comer, otra vez lo mismo, pues nada”. Al final fue una experiencia muy buena a pesar de eso y poder competir en los Juegos Olímpicos, para nosotros los futbolistas, sólo lo puedes hacer una vez por edad y por ser medallista olímpico también vale la pena ese esfuerzo. Nosotros dimos todo lo que teníamos dentro y ganamos la plata en la prórroga contra Brasil, que era una selección muy buena. A día de hoy tengo dos compañeros de aquella Brasil, como son Douglas y Diego Carlos. Va a ser un tema del que voy a hablar con ellos, a ver cómo era su alimentación.
Unos Juegos a los que vas con Luis De la Fuente. Con él habéis logrado ahora la clasificación para la Eurocopa en la absoluta. Enhorabuena, Pau, aunque no has participado en esta ventana, estás teniendo presencia intermitente en la Selección. ¿Cómo lo estás viviendo? Ahora entiendo que esa merma física te había pasado factura también a nivel nacional.
He tenido mucha continuidad en la Selección y el año pasado dejé de ir a dos-tres convocatorias, y para mí el volver es una alegría enorme. Simplemente por el hecho de volver a estar en la lista ahora incluso valoro más lo vivido anteriormente, haber podido ir regularmente, tener minutos. Estar en la lista, estar en la Selección lo valoro todavía más y si vienen minutos, pues mejor. Al final, la Selección es un grupo de elegidos y el pertenecer a ese grupo ya es algo de lo que estar muy orgulloso.
¿Qué destacas del trabajo del seleccionador? ¿Cómo es? Tú lo conocías ya, como hablábamos, de la Sub-21.
Sí, es un entrenador que te hace sentir seguro de que puedes competir contra cualquier equipo. Él visualiza las cosas mucho antes de que pasen y creo que esa seguridad que él tiene hace que el jugador se sienta tranquilo, que con lo que ha trabajado en el entrenamiento van a salir las cosas, y así se ha visto en estos partidos de clasificación. Creo que el grupo ha estado muy tranquilo, muy concienciado en su trabajo y él ha sido un seleccionador justo en el sentido de que ha entrenado mucho tiempo en las inferiores a mucha gente que ahora está en la absoluta y conoce muy bien a cada uno, eso va a su favor. Sabe identificar cuándo un jugador está bien y cuándo no porque lo ha tenido anteriormente.
Hablas de tranquilidad y seguridad, que parecen términos complicados de relacionar con el momento que ha vivido la Selección, con el eco del ‘Caso Rubiales’, con De la Fuente en la palestra por sus aplausos, vuestro comunicado de apoyo a la selección femenina… ¿Cómo lo has vivido? ¿Cómo lo habéis afrontado internamente?
Sí, él fue muy claro con nosotros. En la primera concentración nos dijo: “Éste va a ser el único momento, en la primera charla, en el que hablemos de esto y, a partir de ahora, nos vamos a centrar en el fútbol, en conseguir los resultados, que vamos a competir por cosas importantes para nosotros”, como era la clasificación. Y supo aislarnos desde el primer momento. Nos dijo lo que tenía que decir y a partir de ahí nos centramos simplemente en el fútbol. Que necesitábamos ganar porque anteriormente habíamos perdido con Escocia y necesitábamos sumar todos los puntos para poder pelear por ser primeros, que es la situación en la que nos encontramos a día de hoy. El hecho de ver en el horizonte ese objetivo fue lo que hizo a la Selección centrarse en el fútbol, en trabajar y en ganar.
Y como selección absoluta nos sentíamos en la necesidad de hacer un comunicado, de pronunciarnos. Lo hicimos nada más llegar, nos reunimos todos después de comer, porque estábamos citados a la una en Las Rozas, y entre todos hicimos el comunicado. Fuimos claros. Teníamos que hacerlo.
¿Teníais que hacerlo o queríais hacerlo? ¿Lo sentíais?
Sí, nosotros sentíamos que debíamos pronunciarnos. Creo que cualquier cosa que la selección, en este caso femenina, necesite sabe que tiene ahí a la selección masculina para apoyarse, para hablar con nosotros, para hablar con los capitanes, para trasladarnos lo que ellas ven como necesidad, y a partir de ahí, si nosotros les podemos ayudar en cualquier cosa, nosotros estaremos encantados.
¿Te molesta que a ese comunicado se le reprochara también falta de contundencia o que deberíais haberlo hecho antes?
Lo hicimos nada más reencontrarnos después de lo que había pasado y lo sacamos el primer día de volver a vernos. En ese sentido, por más que se dijera, nosotros estábamos tranquilos porque lo hicimos nada más pudimos. No lo podíamos hacer antes.
¿Cómo ves desde la distancia a tu Villarreal? ¿Estás sufriendo por la situación que atraviesa el equipo? No acaba de encontrar estabilidad.
Sí, estoy sufriendo. Siempre estoy pendiente, estoy en contacto con algunos compañeros. Yo creo que hay plantilla, hay nuevo entrenador, hay una grandísima directiva y estoy convencido de que las cosas van a ir mejor. Es verdad que estas diez primeras jornadas están generando un poco de dudas con los resultados, que no están siendo buenos, pero creo que hay potencial de sobra para pelear por lo que el Villarreal siempre ha dado. Si este año desde el primer momento no se puede estar arriba, pues hay que hacer fuerza entre todos los que queramos al Villarreal para que el club vuelva a estar donde debe de estar. Están a tiempo todavía de escalar posiciones y tienen que empezar a centrarse en eso, en cada partido intentar sacar cosas positivas y que las sensaciones vuelvan a ser buenas. Estoy convencido de que irán a mejor en estos próximos partidos.
¿Crees que se tendrá paciencia con Pacheta, que es un buen entrenador para conseguir ese objetivo?
Sí, yo creo que sí. Creo que es un entrenador que durante su carrera ha entrenado en distintos países, en distintas competiciones, que se ha ganado el derecho de poder entrenar a un equipo como el Villarreal. Ha intentado probar varios sistemas y a ver si encontramos uno que dé continuidad. Yo creo que a partir de que consigan una victoria todo se verá de otra forma, la dinámica será positiva. Yo me he enfrentado contra él en Segunda “B”, cuando él estaba en el Elche, que ascendió ganándonos al Villarreal “B” en la última fase del playoff. Me enfrenté contra él el año siguiente porque yo salí a Málaga y él volvía a estar en Elche, logró subir, y cuando él subió al Primera que no le dieron esa oportunidad de entrenar, yo decía: “Hostia, este tío se lo ha trabajado todo y ahora que ha metido al equipo en Primera no puede”. O sea, que yo me alegro de que él esté en Villarreal y ojalá que las cosas le vayan muy bien.
Después de Unai y antes de Pacheta estuvo Quique Setién. Me ha llamado la atención lo que has comentado de volverte a poner delante de una charla de Emery y darte cuenta de que lo habías echado de menos. ¿Cómo de difícil o no fue el cambio de Unai Emery a Setién? ¿Qué pasó?
Fue muy difícil vivir la salida de Unai nada más empezada la temporada. Vino Quique con sus ideas, igual de respetables que las ideas que tenía Unai: Unai siempre ha intentado trabajar más la estructura del equipo, estar bien organizados, y Quique era un entrenador que venía con ideas nuevas, sobre todo en ataque, y un entrenador que vive de tener la posesión y de controlar el fútbol a partir de ahí. A mí las ideas que tenía Quique me gustaban, porque era un entrenador que iba arriba a presionar, iba sin ningún miedo, que quería ser valiente con el balón y creo que teníamos jugadores para hacerlo. Y, bueno, dentro de que la situación fue dura de cambio y los momentos del inicio fueron difíciles, el Villarreal terminó jugando muy buenos partidos y en posiciones europeas de nuevo.
“La paciencia que se tuvo con Quique Setién es la paciencia que también se merece Pacheta para desarrollar sus ideas y ver sus frutos en el futuro”
Jugador del Aston Villa
Yo disfruté de un fútbol de ataque, asociativo, en el que nosotros también nos sentíamos cómodos. Los resultados el año pasado se dieron. No sé si este año se han notado las salidas, si los jugadores que han llegado nuevos todavía se tienen que hacer al equipo, que al final ese periodo de adaptación creo que todo el mundo lo necesita, pero el trabajo de Quique para mí fue bueno porque se enfrentó al Villarreal después de tener al mejor entrenador de su historia, el que te había hecho lograr el primer título europeo, jugar en Champions… Consiguió ganarse al equipo, a los jugadores y que termináramos rindiendo bien. Creo que esa paciencia que se tuvo con Quique al principio es la paciencia que a día de hoy también se merece Pacheta para que pueda desarrollar sus ideas y ver sus frutos en el futuro.
¿Qué te dijo el presi cuando le dijiste que te marchabas? Porque tenéis una relación muy especial Fernando Roig y tú.
Sí. Me respetó mis pensamientos, me dijo que si yo estaba contento, que él lo iba a estar. Yo le dije que si le daban lo que él quería por mí, pues que bien, pero que si no le daban lo que él quería, que yo me quedaba. (Se ríe.) Yo quería darle al Villarreal un gran traspaso por todo lo que yo he vivido en el club, porque es mi casa y yo quería que ellos se beneficiaran de mi venta. Y bueno, que me iba a seguir de cerca, que si yo estaba contento él iba a estar contento, y que él sólo quería que me fuera bien. Que no quería que me fuera a un equipo para no jugar, que él quería que yo siguiera creciendo.
Fuimos a grabar la despedida juntos, en ese momento valoramos las situaciones que teníamos, lo que habíamos vivido, el agradecimiento que nos tenemos mutuo. Si ellos no hubiesen apostado por el Villarreal en sus inicios, yo probablemente no sería el jugador que soy, y para ellos también el haber formado a un jugador que ha conseguido todo con el Villarreal y después poder llevarlo a una competición como la Premier, creo que también al club le hace grande. Ahora toca vivir esta situación de seguir creciendo yo a nivel personal y de que el Villarreal siga su crecimiento también como club. Ellos se desviven por el Villarreal y siempre van a querer lo mejor para el club, no hay nadie más preparado que ellos para vivir cualquier situación. Desde la distancia ellos saben el aprecio que les tengo y que siempre les voy a desear lo mejor. Son como mi familia.
¿Y tu familia de sangre cómo lo vivió? ¿Qué te dijo tu abuelo, del que tanto hemos hablado? El que te llevaba a entrar desde los 5 años a la ciudad deportiva de Miralcamp.
Él, contento. Me dijo que él se alegraba por mí, que si eso era mi crecimiento, que adelante y que sin dudarlo, y que a seguir trabajando mucho. Él insiste mucho en eso, en trabajar y trabajar. El día que debuté en el Villarreal me dijo que ya se podía morir tranquilo. Ahora el verme crecer fuera de nuestro país, de nuestra ciudad, de nuestro club, también son experiencias nuevas para él, el apoyar a otro equipo. Está muy contento por cómo me están yendo las cosas a nivel personal, el haber vuelto a la Selección, es algo de lo que él se alegra inmensamente.
¿Ha ido a verte ya en algún partido de la Premier o la edad ya no se lo pone fácil?
No, me ve desde casa, desde el sofá, porque ya con 87-88 años viajar se le complica un poco, pero bueno, si tuviéramos algún partido muy especial, no lo descartaríamos (ríe). Sería buena señal a nivel de salud que él pueda viajar.
Tú siempre has sido un chico muy sensato y centrado, Pau, pero, ¿qué crees que has madurado aún más en estos meses? ¿Qué ha supuesto para ti salir de Vila-real, del club de toda tu vida, más personal que profesionalmente?
Sí, salir de esa zona de confort siempre es algo que te hace crecer y las cosas están yendo bien. A nivel personal, junto con mi mujer, con Paula, hemos salido de nuestra ciudad, porque para ella también ha sido muy difícil el tener a sus padres a cinco minutos de casa y ahora estar lejos de ellos. Ella y yo nos apoyamos muchísimo el uno en el otro y a nosotros también nos va a servir para crecer en nuestra relación y como personas. Estar aquí en un país diferente, en una nueva cultura, tenemos que intentar adaptarnos a esto. Ella domina perfectamente el inglés -en eso me saca ventaja, aunque yo también me defiendo-, y ese crecimiento a nivel personal sí que creo que me está llevando a mi mejor momento. Tener 26 años, haber hecho un trabajo previo en Villarreal muy bueno, el poder haber vuelto a la Selección, estar en otro club empezando y teniendo participación e importancia dentro del equipo… Creo que todo están siendo cosas buenas, y esperemos que continúe esta dinámica.
Eres ‘el xiquet del poble’, con el equipo de tu vida lograste la Europa League, el primer título de su historia, y aún recuerdo a Fernando emocionado el día que me contó en una entrevista que le habías regalado tu medalla de campeón. Se perdió aquel partido por coronavirus después de haber viajado hasta Gdansk, vaya odisea aquella.
Sí, me acuerdo que estábamos el mismo día del partido en el hotel y nos dijeron antes de la comida que se tenía que volver a hacer otra prueba para ver si le dejaban estar, y después ya nos dijeron que finalmente no podía. Que no pudiera estar en el partido más importante de la historia del club una persona que se ha desvivido por él, pues era algo que nos daba muchísima rabia, muchísima pena. Dedicarle a él ese triunfo. Yo ya me quedo con la foto levantando la copa y encantadísimo de que él pueda tener la medalla que se merece más que nadie.
Levantaste aquella copa y ¿cuál más te gustaría levantar? ¿A qué aspira Pau Torres?
Me encantaría poder conseguir un título con el Aston Villa. Como jugador me aportaría algo muy positivo ganar otro título con otro club. Es el trabajo que quiere conseguir Unai en este periodo de tiempo que él quiere liderar este club. Es algo que debemos intentar conseguir, bien sea algo a nivel europeo o algo a nivel de Inglaterra. La Liga es muy difícil, pero las copas, la FA Cup es algo que ilusiona muchísimo aquí en Inglaterra. Se vive con muchísima tradición y el objetivo del club debe de ser ése, pelear en Liga pero intentar conseguir algún título que hace tiempo que no consigue y que sería algo muy positivo.
¿Y más a largo plazo? Unai nos dijo hace unos días que sueña con ganar la Champions, que se vio muy cerca de la final de París contra el Villarreal. ¿Tú también?
Estuvimos cerca después de eliminar a grandísimos equipos como la Juventus y el Bayern, nos faltaron 45 minutos. Creo que en la primera parte lo dimos absolutamente todo. Fue una lástima que se nos lesionara Gerard en aquel partido, en la media parte, porque de verdad lo teníamos ahí. Y también vimos el tipo de equipo que era el Liverpool, que no se arrugó en ningún momento y supo darle la vuelta a la eliminatoria. Ojalá yo pueda ganar las tres competiciones con Unai. Ya de momento tenemos una Europa League, este año estamos centrados con la Conference y a ver lo que nos depara el futuro. Pero, ojalá, lo firmaría en cualquier sitio el ganar con Unai las tres competiciones.
“Ojalá pueda ganar las tres competiciones con Unai. Tenemos una Europa League, estamos centrados en la Conference y a ver qué nos depara el futuro”
Jugador del Aston Villa
Precisamente del Real Madrid se habló mucho por que estaban interesados en ti. ¿Qué pasó para que no se diera? ¿Hubo conversaciones o negociaciones? No rechazaste irte, ¿no?
No, no lo rechacé. Yo jamás rechazaría a un equipo como el Real Madrid o como el Barcelona, uno nunca los puede rechazar. Se dieron conversaciones pero finalmente el Madrid tuvo una opción de mercado que era muy buena, que era traer a Alaba libre. Es muy difícil encontrar ese tipo de jugadores libres. Al final, para que se dé un traspaso se tienen que dar muchas circunstancias y en ese momento no se dio y no pasa absolutamente nada, uno continúa trabajando y los sueños de uno continúan intactos. En ese sentido, centrado en lo mío.
¿Sería un sueño (intacto) jugar en el Real Madrid?
No, sería un sueño conseguir un título con el Aston Villa. Ése sería el siguiente sueño. Y, a partir de ese trabajo, las cosas ya irán llegando. Ahora estamos centrados en eso, en hacer del Aston Villa un club ganador y volverlo a poner donde se merece.
