De Ridder, por la vía belga que abrió la leyenda Hervelle – AS

Si Killeya-Jones no regala ni media sonrisa cuando comparece ante los medios, De Ridder tampoco es el hombre más expresivo del universo. Pero es lo normal en un chaval de 20 años que acaba de salir de la ‘formal’ Bélgica. En Miribilla se abrió la vena belga, y de qué manera, con Hervelle, toda una leyenda, y continuó con Tabu y un Serron capaz de jugar con una pierna casi colgando. Gente de carácter, aunque fuera de la pista .

Hay muchas esperanzas depositadas en De Ridder, que viene de brillar en el Europeo Sub-20 y después participó con el primer equipo en el Preolímpico. Ha firmado por dos años y otro opcional y tratará de hacer olvidar a Sulejmanovic, que se ha marchado al Zaragoza. “Es un jugador muy joven de los mejores de su generación. Esperamos que, desde esa juventud, nos aporte energía. Ha demostrado ganas de progresar desde que ha llegado. Asume el reto de venir a la Liga Endesa, la más potente, y tiene condiciones para aportar rendimiento ya”, le descubre el director deportivo del Surne, Rafa Pueyo, quien añade que se trata de un gran reboteador, sobre todo en ataque, corre bien la pista y tiene habilidad para jugar el ‘uno contra uno’, de cara y cerca del aro, finalizando con ambas manos. Incluso puede amenazar de tres a pies quietos. “Pelea por cada posesión, hay que darle tiempo para que se adapte a la exigencia y el nivel de la Liga Endesa, porque tiene una gran capacidad de progresión”.

A De Ridder le ha encantado lo que ha visto hasta el momento en Bilbao. En Artxanda trataban de remendar algunos defectos esta mañana operarios municipales. “Me han acogido muy bien. Es la primera vez que estoy fuera de Bélgica y el ambiente de los partidos es fantástico. Hemos tenido un buen arranque de temporada y me está gustando todo”, remarca el pívot de Brasschaat. La semana pasada tuvo ocasión de hablar con Hervelle y le prometió que pronto vendría a Bilbao para acompañarle y alentarle en un par de compromisos. El sábado les espera el derbi de Vitoria ante el Baskonia y nota “más tensión” porque “en este tipo de encuentros todos suelen estar muy puestos”.

En su estreno en la ACB jugó 10 minutos e hizo 4 puntos. y 1 rebote. Se tiene que pelear por los minutos con Tsalmpouris y Andersson, pero eso le motiva. “La ACB es la mejor competición de Europa. Hay una gran diferencia con la liga belga. Hay tiempo para explotar mis capacidades. Me motiva tener otros dos compañeros para disputarnos la posición de ‘cuatro”.