La enfermería grana se va llenando y el equipo de Dani Vidal lo está acusando
La última derrota ante Unionistas también dejó a Pablo Fernández fuera de combate
El Nàstic se las prometía muy felices en septiembre cuando gozaba del liderato y se mantenía invicto. Sin embargo, un octubre negro que tuvo continuidad en casi todo noviembre acabó no sólo por sacarlo de lo más alto sino también del play-off. La ansiada victoria llegó contra la Cultural Leonesa (3-0) hace dos jornadas, pero los de Dani Vidal volvieron a las andadas cayendo ante Unionistas (2-0) donde perdieron más que tres puntos.
Las lesiones han estado en el día a día del equipo desde hace semanas, aunque en los últimos tiempos los contratiempos se han multiplicado. Es cierto que los grana no jugaron bien frente al equipo salmantino e incluso el propio Vidal reconoció que “tal y como hemos salido a jugar, ya podíamos tener a los 23 jugadores disponibles que no habríamos ganado en ningún campo”. Pese a todo, la realidad es que la enfermería está llena y especialmente en ataque se está acusando el problema.
Son seis las bajas que tiene el Nàstic sumando la de Pablo Fernández producida en Salamanca por una fractura nasal. El atacante se une a los ya lesionados Marc Fernández, Gorka Santamaría y David Concha. Maurizio Pochettino sí está disponible, pero cuenta poco y además servía como recambio de Tirlea en el lateral derecho. Los defensas Pol Domingo y Nacho González completan una nómina de bajas que lastra y frustra al Nàstic.
