Justine Triet sumerge al espectador en la detenida y precisa diseccin de los rigores de la vida en pareja
Un procedimiento puede llegar a ser mucho ms que una forma, una estructura o una manera de llevar las cosas a cabo. El modo de hacer las cosas determina, en segn qu casos, la cosa y hasta la causa misma. Un juicio, por ejemplo, es mucho ms que simplemente la exposicin de las razones a favor y en contra sobre un supuesto delito para llegar a una conclusin o sentencia. Un juicio tambin es una ceremonia (una forma) que aspira a representar a la verdad misma. Se sabe por definicin imperfecto, puesto que solo puede dar fe de las versiones de los implicados para como mucho imaginarse lo que verdaderamente ocurri, pero acta ante su pblico (la sociedad) con un boato de togas, juramentos y prosa rspida como si el mismsimo dios (o el pueblo soberano en su versin laica) estuviera presente. Bien mirado, se y no otro es el sentido mismo del arte. Se trata de dar forma a la vida misma para alcanzar a representar la verdad y nada ms que la verdad. Luego hay otro arte cuya misin es destruir esa forma y denunciarla como el engao que es, pero eso tambin exige de su rito (iconoclasta en este caso) y su forma que no es ms que la destruccin de las formas.
‘Anatoma de una cada’ es un depurado ejemplo del prrafo precedente y, adems, una perfecta ilustracin de la importancia de precisamente la forma. Se parte de un hecho grave: la muerte de un hombre que aparece desplomado al pie de una ventana. El hombre es marido y, adems, padre. Todo parece un hecho fortuito. De hecho, casi todo en la vida en un primer momento no es nada ms que el producto de una casualidad animada por fuerzas ocultas hasta que el orden de las causalidades le da sentido. Pronto aparecern las dudas y, de su mano, los indicios, las pruebas y hasta las culpabilidades. Fue suicidio o asesinato? Si lo primero, qu le llev a la vctima a ello? Pudo acaso estar motivado por razones ms profundas y acabar por ser el responsable de un suicidio otra persona? Si lo segundo, puede haber disculpa para el ms extremo e injustificable de los actos? Pueden ser acaso los inocentes culpables y viceversa?
La pelcula se organiza alrededor de un juicio; el juicio a la esposa y, adems, madre. Y desde ah se entretiene, como hacen los mismos procesos penales, en representar la verdad. En realidad, la misma pelcula no es ms que la representacin de la propia representacin de la verdad que es el juicio. Suena laberntico y, en efecto, lo es. Un laberinto hipntico y proverbial. Adems de terriblemente absorbente y un poco angustioso. Toda la pelcula, de la mano de un guin algo ms que solo perfecto y soportado a pulso por la descomunal interpretacin de Sandra Hller, no hace nada ms que investigar y poner al descubierto los hilos tensos y algo (tampoco tanto) sutiles que soportan eso que creemos que es la realidad. De repente, cada una de las certezas que cosen lo que llamamos vida en pareja son discutidas como las imposturas que probablemente son.
Triet acierta a componer una pelcula cuyo contenido es l mismo la forma. Y al revs. Cuando se discute de cosas tan evidentes como el machismo o tan lricos-estructurales como el heteropatriarcado en realidad se habla sobre formas, sobre representaciones, sobre los procedimientos que determinan las cosas, los casos y las causas. La forma es el argumento, la esttica es la misma tica. Lo que cae al suelo desde lo ms alto de una casa adorable y muy alpina no slo es el cuerpo de un hombre. Tambin se desploma la ilusin de felicidad y de normalidad que tena forma de vida en comn, forma de verdad.
La directora se las arregla para confeccionar la ms descarnada autopsia de una pareja no necesariamente en descomposicin. Cualquier otra (la ma, incluso) vale. Da la impresin de que se trata de diseccionar simplemente la herida que deja en un escritor, acadmico y marido el ver cmo su mujer dispone de algo que l est lejos de poseer (talento para escribir y valenta para llevar a cabo sin aspavientos lo que desea), pero no. Poco a poco, la instruccin del caso, que tambin es la instruccin de la propia pelcula (representacin de representacin, decamos), se convierte delante de los ojos del espectador en algo mucho ms sustancial, universal y para nada anecdtico. La forma nos incumbe a todos, la forma es todo. Somos simplemente lo que nos forma. Pura formalidad pues.
