El mundo es masculino para los medios: 2,5 veces más noticias de hombres que de mujeres – El Periódico de España
El mundo es un lugar eminentemente masculino, si tenemos en cuenta el relato de los medios de comunicación escritos. Un informe denuncia que la brecha de género informativa es aún ostensible: se publican 2,5 veces más noticias sobre hombres que sobre mujeres.
El informe Mujeres sin nombre, elaborado por la consultora Llorente y Cuenca a partir del análisis de 14 millones de noticias procedentes de 12 países (entre ellos España), evidencia una infrarrepresentación femenina en los medios de comunicación y una distorsión de la imagen que se transmite de las mujeres.
Más allá de que se les reserva menos espacio informativo que a los hombres, pues protagonizan muchas menos noticias, las que sí aparecen en los medios lo hacen en muchas ocasiones despojadas de su nombre y sus apellidos, que son sustituidos por su condición de mujer. Según el informe, el nombre propio de las mujeres aparece un 21 % menos en los titulares que el de los varones y hasta un 40 % menos en las temáticas más relevantes.
Así, lectores y lectoras se encuentran delante de noticias sobre mujeres sin nombre, algo que, según la consultora, “transmite sesgo, no es informativo e invisibiliza”. Por ejemplo, el titular “una mujer gana el Nobel de Física”.
Hombres que escriben sobre hombres
El periodismo deportivo tiene mucho camino por recorrer, a juzgar por los resultados del estudio: sólo una de cada 20 noticias de deportes están protagonizadas por mujeres.
Y la visión del mundo que transmiten los medios no sólo está masculinizada en su contenido, también en la autoría: ellos firman un 50 % más de piezas, cifra que puede llegar al 75 % en ámbitos como la economía, la tecnología o el deporte. Hombres que escriben sobre hombres. “Los resultados de este informe sostienen la tesis de que el género desempeña un papel en la credibilidad percibida de un artículo periodístico”, precisa el estudio.
Otra cuestión que agranda esa brecha informativa es que se mencione el género de las protagonistas de las informaciones (mujer, femenina,…) hasta 2,3 veces más que cuando una noticia se refiere a un hombre (que no se aliña precisando que se trata de un hombre ni se refiere al universo masculino).
“La subordinación semántica las relega a un rol secundario y anecdótico”, incide el informe. Limitar a las mujeres sujeto de las noticias a un marco conceptual estrictamente femenino introduce sesgos, homogeneiza y “despersonaliza a un grupo poblacional que en realidad es diverso y que supone más del 50% de la población mundial”.
Referentes femeninos distorsionados
Subordinación paradigmática en los medios de comunicación es aquella que vincula a una mujer con otros hombres, ya sean familiares o parejas: hija de, esposa de. En las noticias sobre mujeres se menciona en un 36 % más de casos a la familia, una referencia que sube de forma importante en las noticias económicas (cuatro veces más que en los sujetos varones) e incluso las científicas (el doble).
En política, las relaciones familiares se mencionan menos, pero es la categoría informativa que más alude a “la soltería, el matrimonio o el divorcio de las mujeres”, un 40% más que en las piezas relativas a políticos varones.
“El tipo de referentes femeninos que estamos proyectando a las nuevas generaciones y futuros decisores sigue distorsionado. Seguimos hablando poco de ellas y a menudo de forma sesgada”, indica la directora de Operaciones de Llorente y Cuenca, Luisa García.
También existen importantes diferencias en las piezas informativas que tratan sobre hombres y sobre mujeres a la hora de abordar su vestimenta: en el caso de ellas, hay alusiones al atuendo físico en 1 de cada 25 noticias, un 20 % más que lo que se dice de ellos.
La investigación de Llorente y Cuenta pone asimismo sobre la mesa que las mujeres aparecen sobrerrepresentadas como víctimas de violencia y acoso. Y que aquellas que se muestran como referentes son personas excepcionales, como si sólo las mujeres fuera de serie pudieran merecer un espacio informativo. Esto, denuncian las investigadoras, alimenta el síndrome de la impostora, la inseguridad y el burnout de aquellas lectoras que lleguen a la conclusión de que esa excepcionalidad puede interpretarse como la normalidad que ellas deben alcanzar.
“No es suficiente con ser buenas: parece que las mujeres necesitan hacer algo extraordinario para ser noticiables. El referente de mujer que reflejan los medios es, con mucha frecuencia, de éxito y excepcionalidad”, insiste el estudio.
La consultora responsable del estudio ha analizado 14 millones de noticias con menciones explícitas al género, procedentes de 78.000 fuentes de información de 12 países: Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, España, Estados Unidos, México, Panamá, Perú, Portugal y República Dominicana.
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