El draft de la WNBA mantendrá su fecha, 17 de abril, pero se hará, por la crisis del coronavirus, de forma virtual. Sin las jugadores ni sus comitivas ni aficionados ni medios de comunicación.
Así lo ha anunciado la propia Liga femenina. A partir de la 01:00 (hora española) la comisionada Cathy Engelbert anunciará las elecciones del draft en un especial televisivo que podrá seguirse en Estados Unidos a través de ESPN. Las elecciones más altas formarán parte del evento, pero lo harán también de forma remota y en ningún caso presencial. Entre ellas (irá a New York Liberty con un número 1 cantadísimo) la base de Oregon Sabrina Ionescu, una de las jugadoras más esperadas en la Liga profesional de la historia del baloncesto femenino. Ionescu parecía carne de número 1 hace un año pero decidió regresar a Oregon, donde sus números han sido históricos. Finalmente, ha tenido que despedirse sin jugar el torneo, suspendido también por el coronavirus.
La comisionada ha defendido este sistema: “Las jugadoras universitarias tienen derecho a ser drafteadas, este evento es uno de sus sueños. Esto se ha decidido con las franquicias. Sentíamos que era importante que las jugadoras vivieran esta celebración que reconoce el trabajo que han hecho y los méritos que han acumulado hasta aquí“.
Más difícil es saber si la temporada mantendrá sus fechas, fijadas para el 26 de abril como día de inicio de los training camps y para el 15 de mayo como primera jornada de la Regular Season: “Es pronto para saber cuales van a ser las circunstancias para entonces, pero el escenario en el que trabajamos es ese, con la temporada empezando en sus plazos. Por eso tenemos que tener draft. Los equipos están planificando sus plantillas, y el draft es una parte importante de eso“.
Esta nueva temporada tenía decretado un parón de un mes para que las jugadoras pudieran disputar los Juegos Olímpicos de Tokio, que han sido pospuestos. Ese vacío (del 11 de julio al 15 de agosto) podría ser aprovechado, tal y como reconoce Engelbert, en el caso de que haya que modificar y reorganizar el calendario: “No dejamos ninguna opción sin contemplar. Tenemos nuestra fecha inicial todavía fijada y tenemos escenarios de retrasos de 15, 30, 60, 90 días… Nuestro trabajo es valorarlos todos, ver pros y contras, mantener el interés por la WNBA también en estos momentos de crisis para todo el mundo. Sigue siendo, como todo el deporte femenino, una competición que ahora tiene mucho apoyo”.
Esta estaba llamada a ser una temporada histórica para la WNBA después de la aprobación en enero del nuevo convenio colectivo, un enorme salto adelante para las jugadoras en términos de salarios y también en cuanto a derechos laborales.
La directora ejecutiva Terri Jackson ha asegurado que también se han preocupado de las jugadoras que estaban en competiciones fuera de Estados Unidos cuando estalló la crisis de salud pública del coronavirus: “Queríamos que tuvieran claro que tenían que tener un plan, fuera el que fuera. Si decidían quedarse lejos de EE UU, con sus obligaciones contractuales, o regresar aquí. Queremos que tengan un plan bien estructurado, no solo identificar sus vuelos sino conocer los problemas que se pueden encontrar a partir de ahí“.
“El draft de la NBA podría tener que retratarse”
Mientras, el draft masculino prosigue con una preparación atípica. Los jugadores siguen anunciando su disponibilidad para la cita, fijada para el 25 de junio, aunque la pandemia no solo suspendió el torneo de la NCAA sino que frenó todo el trabajo de scouting, la planificación de entrenamientos y prueba… John Calipari, el reconocido entrenador de Kentucky, ha dejado claro que pensar ahora mismo en la celebración de un draft en plazos normales puede ser una quimera: “Tenemos que tomar una decisión. La NBA por ahora mantiene las fechas pero los entrenamientos oficiales con jugadores drafteables se van a tener que aplazar… el draft tal vez se vaya a tener que aplazar también. En la Liga profesional también hay voces que creen que la elección de la siguiente generación de rookies podría tener que ser parada hasta julio o incluso agosto para dar tiempo a que las franquicias hagan al menos una parte del trabajo de análisis y estudio que suele preceder a la toma de una decisión que es fundamental para su futuro y el de los jugadores jóvenes.
