Hiru Salud y Deporte, la revolución tecnológica en el entrenamiento personal – El Deporte Conquense

Ofrecer un trato pormenorizado en el que aunar deporte y salud es lo que Víctor y David han conseguido en Hiru. Estos dos jóvenes emprendedores han decidido plasmar sus conocimientos profesionales en un centro novedoso y único en la ciudad que, además, incorpora la tecnología como incentivo para la motivación y el conocimiento de nuestro cuerpo: “Hiru surge de la necesidad de querer crear un espacio propio para seguir proyectando nuestro trabajo”. Mientras David se centra en el servicio de fisioterapia, Víctor lo hace en la parte del entrenamiento. El trato pormenorizado a cada paciente y su deseo de crear un espacio acogedor conforman las bondades de Hiru Salud y Deporte: “Al ser más pequeños, ofrecemos un trato más familiar y directo. Tenemos más control del proceso porque no puedes hacer algo genérico para todos, sino adaptarte, porque cada persona es un mundo”.

Esa dualidad entre salud y deporte se plasma en un seguimiento al cliente que se evidencia, primero, en una valoración inicial seguida de la preparación de sesiones individuales. De esta forma, Víctor y David optimizan la calidad de los entrenamientos y la formación de los clientes: “Cuando vienen a Hiru, lo que quieren es que les escuches, que les ayudes con la patología que tengan. De hecho, muchos empiezan con la fisioterapia y acaban entrenado.  Y si solo quieren entrenar por salud, les ofrecemos un espacio tranquilo, seguro, agradable y sin agobios. Queremos dar confianza a la gente”. El siguiente nivel se alcanza con los ejercicios grupales: los “Hiru Warriors” entrenan de manera conjunta, lo que favorece la motivación y el esfuerzo: “Los grupos son de máximo diez personas y unos arrastran a otros para mejorar el estado de salud de todos”. 

Aunque todas las sesiones cuentan con variaciones, encuentran en la tecnología un elemento común que marca el compás del entrenamiento a todos los niveles, pues Hiru cuenta con un distintivo que lo convierte en un espacio único en Cuenca: el empleo del software My Zone. Encargado de monitorizar pulsaciones, puntuar el esfuerzo de los participantes y planificar sesiones, el sistema emplea un pulsómetro que los pacientes utilizan cada vez que practican deporte tanto en las inmediaciones de Hiru como en el exterior. A su vez, instalan una aplicación en su teléfono móvil en la que pueden consultar la frecuencia cardíaca, la intensidad de su trabajo, los puntos de esfuerzo que acumulan y su posición en el ranking mensual: “Todo ello también lo pueden ver en la pantalla que tenemos en Hiru. Lo hacemos para motivarles y para generar adherencia. Pueden estar tranquilos porque es un entorno controlado en el que lo importante es aprender”. 

Un método muy visual en el que Víctor y David también dejan su impronta en la aplicación, creando retos y bonificaciones: “Ahora mismo hay un pique sano. Es ahí donde aprovechamos para crear retos semanales y mensuales, premiando el esfuerzo”.  Una herramienta que no solo fomenta el esfuerzo, también la consolidación de la comunidad warrior: “La interacción en la aplicación con otra gente crea compañerismo”. 

Y en su empeño por incorporar la actividad física como una rutina a la vida diaria de sus clientes, el reto de diciembre pasa por entrenar, al menos, cuatro días a la semana y conseguir un mínimo de puntos de esfuerzo con la intensidad de la sesión. Aquellos que lo consigan serán obsequiados con una clase gratis: “En este mes hay muchas cenas, comidas, planes… y poco tiempo para entrenar, por lo que queremos seguir motivándoles a que lo hagan”. Además, han creado unos packs regalo para dejar debajo del árbol estas fiestas: “Incluyen una bola de Navidad con la frase “Deseo salud”, un llavero hecho con impresora 3D en forma de pesa y una tarjeta promocional que puede combinar fisio, entrenamiento, diatermia, radiofrecuencia… Modalidades distintas para que la gente pueda elegir”. 

Pese a los sacrificios que entraña preparar cada sesión con ejercicios adaptados a cada cliente, los promotores de este proyecto buscan marcar la diferencia y, por ello, esperan recibir el nuevo año con pacientes que quieran cumplir en Hiru sus propósitos saludables y deportivos en 2024. 

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