Enrique Collar, el primer ‘Niño’ del Atlético de Madrid: “Rechazó hacer las pruebas del Madrid con 14 años” – Relevo
Hasta la llegada de Koke fue el capitán que más títulos había levantado en el Atlético de Madrid: una Liga, tres Copas (dos ante el Real Madrid) y una Recopa de Europa. Hoy don Enrique, por el recuerdo que dejó ese Ala Infernal junto a Peiró, entre los 50 y los 60, e imagen actual en el carné de socios del equipo rojiblanco; en otros tiempos, cuando empezó a jugar en el Atlético, era Enriquito, el primer Niño en la historia del club por delante de los Fernando Torres, Carlos Aguilera, Juan Carlos Pedraza o Marcelino que vinieron después con ese apelativo. Cuarto jugador con más partidos (470), octavo goleador (105) y capitán con más temporadas en la entidad (10), Enrique Collar se llevó hoy, en su 89º cumpleaños, el precioso homenaje de la Unión Internacional de Peñas en el auditorio del Metropolitano.
“Extremos como Enrique pocos hemos visto. Era fuerte como un roble, no se lesionaba tanto como yo. Seguiré adorando a mi capitán, oh mi capitán”, destacó Adelardo (553 partidos). “Fue un futbolista excepcional, no sólo por velocidad sino por su inteligencia. Siempre era más rápido que el adversario”, resaltó Jorge Mendoza (235 partidos). “Se iba muy bien de los defensas”, subrayó Armando Ufarte (325 encuentros). “Fue un excelso jugador y un estandarte del Atleti. Sería bueno un poco de pedagogía dentro de la afición del Atlético de Madrid para que sepa todo el mundo quién fue”, resumió Roberto Rodríguez, Rodri, (173 choques).
“Aunque no puedas disfrutar del homenaje al 100%, Enrique, la familia rojiblanca está contigo y con tu familia”, pronunció Roberto Solozábal, presidente de las Leyendas del Atlético. La historia en el Atlético de Madrid es cíclica, en los tiempos actuales Margarita Luengo es famosa en el Metropolitano por seguir llevando ese ramo de flores en honor a Pantic, pero hace más de 60 años existía una aficionada llamada Victoria, que era seguidora acérrima de Enrique Collar y ‘amenazaba’ a los defensas rivales cuando lo intentaban frenar con patadas. “Le llevaba también un ramo de flores”, rememoró el exportero Rodri.
La rivalidad con el Real Madrid
Como la historia es cíclica, por supuesto, la rivalidad con el Real Madrid estaba muy presente en el vestuario colchonero. “El Clásico del fútbol era el Madrid-Atlético, no el Madrid-Barça”, matizaba Joaquín Santiesteban, presidente del Senado del Atlético de Madrid. “El título más importante de nuestra carrera fue ganar al Real Madrid”, soltó Jorge Mendoza, que desató las risas de todo el auditorio. “Como le molestó a Di Stéfano, que no había ganado la Copa del Generalísimo y se la fastidiamos dos veces”, añadió Adelardo.
Uno de sus hijos, Alfredo Collar, desveló la anécdota de cómo rechazó hacer la prueba en el Real Madrid por jugar en el Atlético: “La ilusión de su vida era militar en el Atleti. Había un vecino que le veía jugar y un día llamó a su puerta y le dijo que tenía un amigo en el Madrid para que hiciera las pruebas. Pero su idea era jugar en el Atleti y se presentó un día con sus hermanos a unas pruebas, aunque no estaba ni apuntado; pero levantó la mano cuando empezaron a nombrar a un niño que no se había presentado y así nació su historia en el Atleti”.
Atlético de pura cepa, pasó antes por los equipos de Peña Norit, de Argüelles, y Corpus Christi hasta que a los 14 años hizo las pruebas en el Atleti, con Ramón Colón y Ramón Gabilondo, del Atlético Aviación, como entrenadores. No tocó bola en todo el partido-prueba porque todos esos niños querían destacar y al extremo zurdo no le llegó ningún balón hasta que llegó un córner. “Niño, repite otra vez el córner”, le dijo Colón impresionado por la técnica del chaval. “Niño, ahora ponla al segundo palo”, y así se quedó con lo de Niño y entró a formar parte de la historia del club rojiblanco para conformar una línea de ataque inolvidable con Miguel, Mendoza, Vavá y Peiró.
“Niño, si te pegan, pega tú también más fuerte”, le decía Escudero. También fue el primero de los futbolistas en mostrar esa faceta coqueta tras los entrenamientos. “Llegaba con su neceser. Sus cremas, sus cositas y su espejito”, apuntaba Adelardo.
“Muchos sabíais que no iba a hablar. Aunque esté físicamente, desgraciadamente no puede subir a dar unas palabras. Recuerdo aquí una anécdota que comparto cuando me dio un cólico nefrítico. Físicamente me parezco a mi padre y le dije: He heredado tu corta altura, tu gran nariz, el neceser y ahora tengo piedras en el riñón como tú, ya podía haber heredado tu pierna izquierda. ‘Sí, pero también mi pelo. Así que alégrate porque no te quedarás calvo’. No tengo ni idea lo que diría mi padre, pero diría el mismo sentido de agradecimiento que pronuncio yo en nombre de mi familia. Qué bonito es ser del Atleti, aunque no lo pueda decir mi padre: es la persona más feliz del mundo“, finalizó el emotivo homenaje su hijo Alfredo Collar.
Todos los exjugadores, familia, amigos y aficionados le cantaron el cumpleaños feliz a Enriquito: el primer Niño del Atlético de Madrid volvió a emocionar como hace 60 años en la banda del antiguo Metropolitano…
