Matteo Spagnolo, el último talento blanco que emigró a la Euroliga: «No me pongo límites» – Relevo
Tiene sólo 20 años, pero lo cierto es que hace tiempo que ha demostrado que la edad, para él, sólo es un número. De hecho, su juventud no le hace aminorarse cuando cada jueves o viernes le toca medirse con los más grandes de Europa. Así se vio hace una semana en el WiZink Center, la que un día fue su casa y en la que, como él bien cuenta, guarda grandes compañeros. “Ha sido muy emocionante”, reconocía Matteo Spagnolo (Brindisi, 2003) al atender a Relevo tras un partido que, eso sí, a los suyos no les fue muy bien (99-75).
Sin embargo, ese resultado tampoco resultó extraño. Más que nada porque al ALBA Berlín le está costando esta temporada (lleva una victoria y 10 derrotas) y porque hasta entonces todavía no había equipo en la competición continental que supiera cómo frenar al Real Madrid de Chus Mateo. Lo segundo ha cambiado este jueves tras la caída de los blancos ante el Fenerbahçe (100-99). Pero, aún así, el estado de forma de los blancos a quien fue su canterano, cómo no, también le llamaba la atención en la que es su primera temporada entre los grandes del Viejo Continente.
“La calidad de los jugadores en Euroliga… Es que ya la conocemos. Sólo este equipo (el Real Madrid) tiene a uno de los mejores jugadores de Europa y creo que del mundo”, explicaba. Eso sí, pese a deslizar eso de “el mejor”, en lo de mojarse con un sólo nombre… Mejor pasa palabra: “El Madrid tiene muchos… Los podría decir a todos, la verdad. Facundo Campazzo, Sergio Llull, Rudy, Edy Tavares, Fabien Causeur… Hay muchísimos”.
Lo cierto es que Spagnolo ha sido el último gran canterano blanco que acabó diciendo adiós a la que fue su casa en busca de minutos y experiencia. El pasado verano decidió poner fin a su relación con la Casa blanca tras dos años de cesiones en su tierra en busca de minutos. Y aunque no descarte un regreso en el futuro, “el Real Madrid es uno de los mejores clubes de Europa y todo el mundo lo sabe. El año pasado ganó la Euroliga…”, sí que se muestra firme en que ahora está “contento” y trabaja día a día por mejorar y tener más minutos entre los grandes.
Este verano, poco antes del Mundial, anunció que tras dejar el Real Madrid se enrolaba por tres temporadas con el ALBA Berlín. Todo ello pese a que había varios clubes que tenían interés en él. Sin embargo, su estrecha relación con Gabriele Procida, el escolta italiano que también milita en el conjunto alemán, y su buena conexión con él en pista -la cual ya muestran desde que arrancó la temporada- provocaron que la decisión fuese “fácil”.
“Conocí al presidente y al entrenador y también conocía al jugador italiano, que está aquí conmigo, a Gabriele Procida, que me había hablado muy bien de Berlín, así que la decisión fue bastante fácil. Es un muy buen ambiente para poder trabajar y mejorar a nivel de equipo e individualmente”, confiesa el base que se ha convertido en el jugador más joven de la Euroliga con más minutos por partido en lo que va de temporada.
Pese a sólo tener 20 años, Spagnolo promedia 5,9 puntos, 1,8 rebotes, 2,7 asistencias y 0,6 robos en una media de 19:26 minutos durante las once jornadas disputadas de la competición continental. Y esa es la mayor cuantía de minutos para, ya no sólo uno de los debutantes en la Euroliga, sino también de los jugadores de 21 años o menos. Aunque para él no existe presión alguna: su objetivo es seguir sumando y mejorar. “No creo que sea una presión. Claro que tengo mucho que mejorar, pero no me pongo límites. Quiero estar bien, jugar bien y seguir jugando mejor con el tiempo”, confiesa.
Al igual que también reconoce que “hay momentos en los que estás arriba y juegas muy bien y otros en los que juegas, pero lo que hay que hacer es seguir trabajando“. “La Euroliga tiene el mejor nivel de Europa y yo estoy muy contento de poder estar jugando ella”, explica el italiano.
Sin embargo, obviamente sus miras están más arriba. Y aunque abiertamente no quiera hablar de la NBA, “la verdad es que no pienso muchísimo”, mantiene, sí que confía en “poder llegar arriba”.
