El paso al frente de Carlos Suárez no es uno más para la Federación: «Éste sí que tiene opciones» – Relevo
Valladolid.- El que fuera consejero delegado, presidente y dueño del Real Valladolid durante veinte años, Carlos Suárez, confirmó este sábado en una entrevista concedida a Relevo lo que hasta entonces eran rumores: valorará seriamente sus opciones para presentarse a las próximas elecciones de la Federación. Y su paso al frente no es uno más. Basta con pulsar las sensaciones dentro de las Territoriales, de los clubes y de los propios futbolistas y entrenadores, con infinidad de votos en la Asamblea de la RFEF, para entenderlo.
El nombre de Carlos Suárez genera un respeto que otros no han logrado. En primer lugar, porque de todos los que han verbalizado sus deseos, es el único que tiene verdadera credibilidad entre los directivos, con todo el respeto para Paco Díaz (Federación Madrileña) y Carlos Herrera (abanderado de la Cope). Y, sobre todo, porque es visto como un duro rival en caso de que Pedro Rocha (actual presidente internio), Salvador Gomar (Comunidad Valenciana) o Rami Aboukhair (ex CEO del Santander) se postulen, que aún no han dicho esta boca es mía estando en las quinielas.
Según las diversas fuentes consultadas, Carlos Suárez posee muchas de las fortalezas que debe tener un candidato a la RFEF. El empresario tiene una experiencia contrastada en el mundo del fútbol, al que llegó en 2001 y del que salió hace un par de temporadas al vender el 51% de sus acciones a Ronaldo por unos 30 millones de euros. Y, además, esa veteranía que ha ido adquiriendo en distintos cargos la ha distribuido entre la Asamblea de LaLiga, donde hasta sonó en 2013 para ser vicepresidente con la entrada de Javier Tebas, y su Comisión Delegado así como en la Junta Directiva de la Federación, donde estuvo en el equipo directivo de Ángel María Villar y con Luis Rubiales durante seis meses.
Estas buenas relaciones institucionales le podrían hacer ser visto como un hombre de consenso en mitad de un clima tan caldeado donde las posiciones se ha extremado con el paso de los años. Su sintonía con Javier Tebas siempre fue excelente. Y eso, en esta guerra del fútbol persistente, es una inmejorable noticia para él. Como lo es que tenga un estrecho vínculo con presidentes de la talla de Florentino Pérez (Real Madrid) y Fernando Roig (Villarreal), o una amistad de las buenas con personalidades del fútbol que son vistas con admiración en FIFA, UEFA, LaLiga y la RFEF como Emilio García Silvero o Mateu Alemany.
Máximo respeto a las Territoriales
Su conexión con los presidentes de las Territoriales también hay que tenerla muy en cuenta. No sólo mantiene una comunicación continua con varios de ellos (Marcelino Maté, de Castilla y León o el propio Salvador Gomar…) sino que, además, se ha preocupado por ofrecerles el respeto que otros les han negado. En declaraciones a este medio ya fue tajante: “Conozco mucho a la gente de las Territoriales, aunque algunos han cambiado, y la Federación es más como el mundo del fútbol en sí. Ellos lo primero que tienen que hacer ahora es decidir hacia dónde quieren ir”.
Lo que sí ha pedido Suárez a los barones es que se pongan de acuerdo: “Deben ver si quieren convocar ya unas selecciones, si quieren esperar, saber si de entre ellos puede haber un candidato, porque no lo han dicho, y entonces según como sean las cosas valoraré mis opciones y si me presento. Ahora mismo todo esto que está saliendo y tanto nombre y tal… Parece que estén subastando una cosa, hay que tener cierto respeto por la gente del mundo del fútbol”.
Más allá de estos años inmerso en el mundo del fútbol, algo de lo que otros muchos presidentes podrían presumir, a Suárez también le avala que tiene una relación magnífica con muchos entrenadores (tuvo 20 en el Real Valladolid y con otros muchos más tuvo que negociar) y sobre todo con los futbolistas, siendo este un punto clave: varios de ellos empujan ahora en favor de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), un sindicato clave en las elecciones federativas.
Pedro Rocha sabe muchas de estas fortalezas. Y en la mañana del sábado, cuando ya le habían pasado las declaraciones de Carlos Suárez, compartió algún que otro chascarrillo en el desayuno de Valladolid y en el césped del estadio José Zorrilla donde, por cierto, no dejó de recibir llamadas y coincidió con algunos directivos y el presidente de la territorial castellano-leonesa, Marcelino Maté, que en su día presidió una Comisión Gestora como él, con una única diferencia: en su caso se conoció la fecha de las elecciones enseguida y llegó a presidir una final de Copa (Barça-Sevilla en el Metropolitano) sabiendo que pronto llegaría un sustituto (Rubiales tras vencer a Larrea) y, en la actualidad, no hay ni intención de convocarlas pese a las urgencias del Consejo Superior de Deportes.
