La resurrección del Barça llegó ante el Real Madrid – Relevo

Al Barça de Roger Grimau le hacía falta un partido como este. Un duelo de alto voltaje ante el mejor rival posible -por algo el Real Madrid es el gran equipo a batir en Europa- en el que, más allá del resultado, lo importante era recuperar sensaciones. Y lo ha hecho. Tanto lo primero como lo segundo (83-78). El Barça ha ganado al todopoderoso Real Madrid con un partido lleno de pruebas, novedades y cambios de sistema que le han salido a Grimau a la perfección.

Los de Chus Mateo no estuvieron cómodos, ni tampoco solventes en la circulación de balón, y aunque estuvieron dominando prácticamente todo el encuentro, la gran lectura que hicieron los culés del choque terminó por dictar sentencia. El Barça supo morder más y mejor y logró sacar a los blancos del partido. Golpe de efecto para los de Roger Grimau, que a la cuarta se lleva su primer Clásico de la temporada, ante un Real Madrid que, pese a todo, sigue líder.

A Roger Grimau no le quedaba otra que probar. La defensa estaba siendo el gran talón de Aquiles para el conjunto culé. Porque aunque se hablara del mal porcentaje en tiro exterior en jornadas anteriores, ahí hasta podía tener excusa. Pero en lo defensivo no. Y otro partido más con esa deficiencia, más aún ante el Real Madrid, hubiera sido ya una hecatombe demasiado grande. Pero no ocurrió. La apuesta del técnico de iniciar el juego con dos ala-pívots (Jabari y Da Silva) formando pareja con Vesely, tanto en el primer cuarto como tras el descanso, funcionó. Como también lo hizo el usar un quinteto de ‘bajitos’ en el que incluso usó a tres bases a la vez Satoransky-Jokubaitis-Laprovittola, que consiguieron aguantar a nivel defensivo y el tercero, liderar de la mejor forma posible: ordenando, asistiendo y anotando. Si la clave era evitar que Tavares lograse entrar en la pintura, ahí tenía siempre a alguien para tratar de que así fuese. Y funcionó. Los cambios de sistema culé hicieron que el Real Madrid no lograse estar cómodo en ningún momento, ni siquiera en esos que estuvo por delante en el marcador. Y esta ha sido la mejor noticia para un Barça que terminó el 2023 con malas impresiones: se puede.

En algún momento tenía que pasar y fue en el Palau. Ese sería mi whatsapp para el Real Madrid. Porque bajar a lo terrenal a veces es bueno. Sobre todo cuando la derrota a nivel de clasificación no supone gran cosa. El Real Madrid no supo reaccionar o, mejor dicho, dar el golpe sobre la mesa cuando tuvo la oportunidad. Y sí, esto le pasa hasta los mejores. Campazzo y Tavares quedaron anulados por el rival y los cambios tácticos y de sistema que hicieron los culés. Y pese a la gran capacidad que los blancos tienen -así lo llevan demostrando toda la temporada- para ser capaz de darle la vuelta a cualquier situación y acabar llevándose el partido, esta vez no pudo ser. Sin drama, a corregir errores y a pensar en el viernes, que hay otra cita europea. Y nada más y nada menos que ante Anadolu Efes.

Posiblemente haya sido el que se pueda considerar el jugador silencioso, pero vaya partidazo ha firmado Nikola Kalinic. Y me explico. Si uno habla de los grandes nombres del Barça en el Clásico seguramente lo primeros que se vengan a la cabeza sean el de Jabari Parker y el de Jan Vesely. El segundo ha sido el MVP del partido y el primero ha hecho bastante daño. Pero es que si ha habido un jugador completo, que ha estado enchufado en los momentos clave para, valga la redundancia, enchufar a los suyos ese ha sido Kalinic. Suya ha sido la canasta que ha puesto al Barça por primera vez en el marcador (y ha acabado con 13 puntos). A nivel defensivo ha estado activo en el rebote (cuatro) e incluso se ha animado a repartir asistencias a sus compañeros (cinco). Una actuación muy completa que ha ayudado, y mucho, al conjunto culé.

Su mejor partido con la camiseta culé… Y ante el eterno rival del Barça. Jan Vesely ha sido la estrella del partido. En ataque y en defensa. Porque ha sabido ganarle la partida a Tavares en el uno contra uno. Ha estado acertado de cara a aro. Y ha sabido leer a la perfección el partido. 28 de valoración tras anotar 27 puntos, cazar cuatro rebotes y poner tres tapones.

Aunque en la segunda mitad quien ha terminado acaparando los focos ha sido Mario Hezonja, la primera parte del Clásico ha tenido un nombre propio. Y no, no ha sido culé. Ha sido bosnio. Porque Dzanan Musa ha firmado 20 minutos para enmarcar. La muñeca del alero ha estado caliente desde el inicio del partido. Y su primer cuarto ha sido para enmarcar. 13 puntos obrados a través de cuatro triples, uno de ellos con un +1. Al final ha terminado el partido con 19 puntos, tres rebotes, dos asistencias y un 24 de valoración. El mejor de los de Chus Mateo.

Lo cierto es que la jornada ha sonreído y mucho a los otros dos españoles. Primero, por esa victoria de Valencia Basket ante Anadolu Efes (98-88) para coger aún más fuerza y confianza antes del estreno de su gran fichaje: Kevin Pangos. Y después, con ese triunfo de los de Dusko Ivanovic no de lo que bien se conoce como ‘carácter Baskonia’ (75-73 a Panathinaikos).

Noelia
Gómez
Mira
es
especialista
en
baloncesto
para
Relevo,
donde
repasa
lo
que
ocurre
en
competiciones
como
la
ACB
y
la
Euroliga.
Ha
sido
la
segunda
mujer
speaker
de
la

historia
del
baloncesto
profesional
en
España
y
la
única
durante
los
seis
años
que
puso
voz
al
Covirán
Granada.
En
su
carrera
ha
colaborado
con
la
ACB
como
speaker
de
la
Minicopa
Endesa
y
fue
jefa
de
sección
en
el
diario
Granada
Hoy,
donde
cubrió
informaciones
de
otra
índole
como
la
Operación
Líbero
contra
el
expresidente
del
Granada
CF
Quique
Pina.
Natural
de
Salobreña,
es
graduada
en
Comunicación
Audiovisual
por
la
Universidad
de
Granada,
con
Máster
en
Nuevos
Medios
Interactivos
y
Periodismo
Multimedia.


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