Al contrario que otros mercados de fichajes en los que en ‘mundo Valencia CF’ se han relacionado infinidad de jugadores, en esta ventana estival desde el minuto uno quedó claro que los che querían en sus filas a tres nombres propios: Sergi Canós, Amallah y Rafa Mir. Con el primero ya fichado y el segundo a expensas de que el Valladolid decida pagar los 2,5M de euros por el 50% de Marcos André, o bien esperar a hacer más hueco salarial, la vía en la que se ha explorado más en las últimas semanas ha sido la del delantero.
El nombre propio es Rafa Mir. No solo por empeño del futbolista, que ha dejado en stand by a Olympiakos y Ajax por el Valencia, sino del propio club che. Las negociaciones llevan transcurriendo semanas y la modalidad sería la de una cesión con opción de compra. Hasta ahí no hay problema, pues el Valencia acepta pagarle toda la ficha a Rafa (sería el tercer jugador mejor pagado tras Gayà y Paulista).
Sin embargo, el gran problema hasta la fecha ha sido el loan fee que exige el Sevilla. El Valencia en un principio no pretendía pagar nada más allá de la ficha del jugador, pero con el avance del mercado en Mestalla están dispuestos a hacer ese desembolso para poder contar con Rafa Mir. Los hispalenses piden 2,6M por la cesión de Mir (es decir su amortización anual hasta 2027), cifras a las que el Valencia, eso sí, no llega. El avance del mercado ha hecho que el Valencia esté dispuesto a dar un paso adelante, pague un loan fee, y tanto Rafa como el club confían en que el Sevilla también de un paso adelante y rebaje en mayor o menor medida sus pretensiones.
La sintonía club-jugador es total. El delantero mantuvo una charla con la directiva en el Sánchez Pizjuán hace una semana en la que el Valencia le trasladó calma y le insistió en que él y solo él era la primera opción para la punta del ataque. El jugador quería que su futuro se hubiera resuelto ya. De hecho, los de Mestalla hicieron hace varias semanas una primera oferta al Sevilla por Rafa pero fue rechazada por no incluir pago por la cesión. El club tiene en el radar a otras opciones como Boyé y Braithwaite, pero el hecho de que sus clubes de origen solo quieran traspaso y no cesión, limita los movimientos por ellos salvo que puedan entrar en otras operaciones de mercado.
El Valencia podrá pagar el loan fee cuando haga más salidas
Como todo en el Valencia, las operaciones de mercado son un rompecabezas. Los che no pudieron fichar a Canós hasta que salió Uros Racic y aunque ahora mismo sí podrían fichar a Rafa Mir, el loan fee no pueden pagarlo hasta que se materialice una de las dos salidas más pretendidas: Cömert o Castillejo.
En el caso de Samu, el club de Mestalla le abrió la puerta a marcharse libre en cuanto Rubén Baraja le incluyó como uno de los descartes. Es más, en la oferta del Abha Club que rechazó en julio, el jugador se podría haber marchado gratis a un club que le ofrecía un salario superior a los 2M de euros netos.
Tras rechazar esta propuesta, club y jugador negocian una salida en la que Samu reciba dinero por abandonar el club. Tal y como informó ayer lagrada, el jugador espera que el Valencia “de un paso adelante” en dicha negociación. Según ha podido saber Relevo, la propuesta inicial para abandonar el club que solicitó el abogado de Castillejo fue de un millón de euros, algo que el club rechazó de todas todas. Ciertamente, al jugador le restan dos años aun de contrato y negocia su salida como más le conviene a sus intereses, pero eso está llevando a un retraso (mayor) en las operaciones en Mestalla.
