Abierta al público una pequeña parte de la nueva Plaza España: "Todo sigue igual" – Diario de Mallorca
Esta mañana ha sido abierta al público una pequeña parte de lo que será la renovada Plaza España, que todavía sigue en obras prácticamente en su totalidad.
El mes pasado se iniciaron los trabajos de instalación de las nuevas baldosas en la mitad más cercana al Bar Cristal y hoy ya se puede circular por un pequeño pasillo ubicado al lado de la estación meteorológica de Gaspar Bennàzar.
En concreto, conecta la parada de taxis con el interior de la Plaza, permitiendo así acceder o salir de la misma a través de tres vías distintas: la ya mencionada, la entrada ubicada al costado de la estatua de Jaume I y el tercer pasillo frente a la conselleria de Salud.
Normalidad entre trabajadores y ciudadanos
Pese a llevar poco tiempo abierta, y teniendo en cuenta que las lluvias que han azotado Palma a lo largo de la mañana han reducido el tráfico de personas por el centro, la respuesta generalizada tanto de trabajadores de locales cercanos, como de los transeúntes ante nuevo pasillo ha sido clara: “Para mí todo sigue igual”, afirmaba un trabajador de un comercio cercano al paso recientemente abierto.
Emilia Martínez, quien debe cruzar Plaza España cada mañana para ir a trabajar, explica que la utilidad de este pasillo viene determinada de la dirección de la que uno proceda, o hacia la que se dirija: “Está claro que si voy de Oms al Corte Inglés no me servirá, pero si me bajo del bus frente al estanco y quiero bajar haca Oms quizás gane un poco de tiempo”.
La mayor densidad de tráfico de peatones sigue concentrándose en el acceso central, frente a la estatua, y este nuevo acceso tampoco aporta una mayor amplitud a la Plaza, ya que entre el acceso principal y el recientemente abierto todavía existe una gran parcela vallada y en obras, pese a que en esa zona ya están instaladas gran parte de las baldosas.
El mismo trabajador del comercio próximo al novedoso acceso comenta que “realmente hasta que no quiten un número considerable de vallas no se notará el cambio”, alegando que “son el elemento que no deja ver los locales y que muchas veces elimina directamente ese factor instintivo de ver un cartel y decir: me apetece algo de ahí”.
En cuanto a la nueva estética de las baldosas, que combinan colores grisáceos y amarronados, todavía no existe una valoración completamente formada: “Quiero esperar a verlo todo terminado”, concluye prudente Martínez.
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