Bayern Munich, en un partido vibrante, venció por 1-3 al Galatasaray, partido válido por la Jornada 3 del Grupo A de la UEFA Champions League disputado en Estambul.
El primer tiempo estuvo lleno de emociones, con un equipo turco que jugó desde el primer minuto metido en el campo del Bayern. Sin embargo, la arriesgada propuesta de los locales dejó espacios en defensa y los alemanes sacaron provecho.
A los 7 minutos, un gran contragolpe entre Jamal Musiala y Leroy Sané terminó en los pies del francés Kingsley Coman, quien definió con un disparo cruzado ante Fernando Muslera y puso el 0-1.
Pero de lejos de irse abajo, los pupilos de Okan Buruk mantuvieron una presión asfixiante ante sus rivales y casi logran el empate al minuto 10, pero inexplicablemente Kerem Akturkoglu falló un disparo solo frente a la portería rival.
El duelo era un constante ida y vuelta, aunque los de casa eran los que más peligro creaban.
Pero finalmente, a los 30 minutos, el conjunto turco conseguiría el empate. Mauro Icardi tomó un penal y lo hizo a lo ‘Panenka’ para dejar tirado en el piso a Sven Ulreich y conseguir el merecido 1-1 en ese momento.
Lucas Torreira fue el más incisivo de los locales, pero el uruguayo no estuvo afortunado con sus remates de media distancia.
En la segunda parte, en especial tras los 15 primeros minutos, el Bayern logró bajarle el ritmo al juego y fue allí donde aparecieron las figuras de Musiala y Harry Kane.
A los 72 minutos, los dos se combinaron y el goleador inglés definió para poner el 1-2 tras un rebote en el defensa y cuando había intentado una definición de tacón.
Por si fuera poco, apenas cuatro minutos después, Kane le devolvió atenciones a Musiala y el joven alemán concretó el definitvo 1-3 a favor de los visitantes.
Con un gol de Alexis Sánchez en la primera mitad y otro de Hakan Calhanoglu tras el descanso, el Inter sumó su segunda victoria (2-1) en la presente Champions League y mantuvo el pleno ante un Salzburgo que presentó batalla pero que sumó su quinta derrota ante los ‘nerazzurri’, líderes invictos del Grupo D.
El finalista de la pasada edición de la Liga de Campeones sigue con paso firme en la competición que ansía desde hace 13 años y, aunque no tuvo un partido cómodo, supo solventar con cierta autoridad los momentos complicados que le presentó el combinado austríaco, que sucumbió en la primera mitad ante el zarpazo de un Alexis desatado y en la segunda al temple de Calhanoglu desde los once metros.
El prometedor jugador israelí Oscar Gloukh había conseguido el empate parcial para el cojunto austriaco.
