Carlo Ancelotti no quiso tirar de Toni Kroos desde el comienzo del Real Madrid-Atlético de Supercopa. El alemán empezó en el banquillo y apareció en la segunda mitad. Lo que no se esperaba es que, nada más entrar al campo, iba a recibir pitos continuos de la afición del Al Awwal Park. No sólo eso, sino que también celebraban los pocos pases que falló. ¿Por qué? Su cruzada contra los países árabes y su nueva influencia en el mundo del fútbol lo explican.
No sólo a él: durante el minuto de silencio que se guardó al comienzo del partido en memoria del recién fallecido Beckenbauer, gran parte de la hinchada abucheó y pitó al alemán. Unos hechos que no tardaron en ser denunciados por aficionados del fútbol de todo el mundo a través de las redes sociales.
Los pitos a Kroos sirvieron para que el alemán utilizara su cuenta de Twitter para ironizar sobre lo que tuvo que vivir cada vez que tocaba la pelota durante la semifinal. “¡Ha sido divertido hoy! Multitud increíble”, escribió acompañado de un emoticono con corazones en los ojos.
That was fun today! Amazing crowd😍
— Toni Kroos (@ToniKroos) January 10, 2024
Los blancos aterrizaron este lunes en Riad… para disgusto del alemán, que en los últimos tiempos ha arremetido con fuerza contra el Estado saudí y la ausencia de libertades en el país. Carlos de las Heras, experto en Deportes y Derechos Humanos de Amnistía Internacional, explicó con cifras la situación en Relevo: “El dato más clarificador es que es uno de los países que, año tras año, está entre los dos o tres primeros con más condenas a muerte. Hasta este octubre ya habían ejecutado a más de 100 personas; condenaron a muerte a un youtuber con diez seguidores. Hay otros temas preocupantes: la libertad de expresión, los derechos de las mujeres…”.
Por qué pitan a Kroos en Arabia Saudí
Pese a ello, la RFEF celebra por cuarto año el torneo en Oriente Medio. La tónica se repetirá, como mínimo, hasta 2029. “Se ha llegado a comentar que allí se juega un fútbol ambicioso, pero todo gira en torno al dinero. Irse a Arabia es una decisión por el dinero y contra el fútbol“, criticó Kroos el pasado mes de agosto en una entrevista con ‘Sports Illustrated’. Los jugadores jóvenes que ficharon por la Saudi Pro League ocuparon el centro de sus críticas.
“Los futbolistas tienen que tomar esa decisión por sí mismos, como Cristiano Ronaldo, que lo hizo en la etapa final de su trayectoria. Pero se hace muy difícil cuando jugadores que están en la mitad de sus carreras, y tienen la calidad suficiente para estar en los mejores clubes de Europa, deciden aceptar esos traspasos. Es ahí cuando esto empieza a ser difícil para el deporte que todos amamos”, lamentó.
Unos días antes, el internacional germano ya había sido noticia por censurar la marcha de Gabri Veiga al Al-Ahli. El gallego, con 21 años y un acuerdo cerrado con el Nápoles, prefirió primar la oferta astronómica de uno de los equipos del PIF, el Fondo de Inversión Pública gubernamental que dota de fondos a cuatro clubes para convertir a Arabia en la nueva superpotencia del fútbol. Cuando el periodista Fabrizio Romano informó del fichaje en Instagram, Kroos mostró su opinión con un comentario tan escueto como contundente: “Vergonzoso“.
No en vano, el ‘8’ ya ha reconocido que no se plantea sucumbir al dinero árabe por una cuestión de “valores”. “La falta de derechos humanos es lo que me impediría irme allí“, comentó. A sus 34 años, Kroos termina contrato este verano con el Real Madrid y sopesa la retirada, un déjà vu de lo vivido el curso pasado por estas mismas fechas.
La oposición a la Supercopa
Además de su cruzada contra el fútbol saudí, Kroos también ha reprobado la venta de la Supercopa de España a Oriente. “Nosotros sólo somos títeres de la FIFA, la UEFA y las demás instituciones. Si existiese un sindicato de futbolistas, no jugaríamos una Supercopa de España en Arabia“, dijo en 2020 en el podcast Einfach mal Luppen que presenta con su hermano. “Por desgracia, no lo decidimos los jugadores. Tratan de absorberlo todo económicamente y exprimirnos físicamente”.
Hasta ahora, eso sí, a Kroos y los madridistas no les ha ido mal desde que el trofeo se disputa en el continente asiático, al menos a nivel deportivo. Han ganado dos de los tres (la edición de 2021 se disputó en Andalucía a causa de la pandemia) con una participación destacada de Toni, que firmó un gol olímpico inolvidable en las semifinales de 2020 contra el Valencia y brilló en la final de 2022 frente al Athletic. En caso de volver a levantar la copa, Kroos sumaría su 21º título con el Madrid y se colocaría a sólo cuatro de Marcelo y Benzema, los que más tienen (25).
Son números a la altura de un futbolista de leyenda, muy querido en el vestuario (Valverde le considera su ídolo), apreciado por el cuerpo técnico y la directiva y diferente a la hora de postularse con los asuntos extradeportivos. Nunca se ha mordido la lengua y tampoco lo hace con Arabia, el territorio hostil en el que tratará de seguir inscribiendo su nombre con letras de oro en la historia del Real Madrid.
