Lo que parecía otro gran duelo de la NBA, terminó con una reyerta, expulsión y ataque violento poco visto por parte del jugador de Warriors de Golden State, Draymond Green sobre su rival Rudy Golbert.
Tras un sobresaliente arranque de los dirigidos por Steve Kerr en la temporada, los Warriors sumaron su tercera derrota seguida en el primer duelo de una serie ante Minnesota (110-116), y las molestias en la rodilla de Stephen Curry, impidiéndole estar en el segundo cuarto, fue una noticia pésima para Golden State, que no tardó en perder a otros dos de sus hombres importantes del quinteto nada más comenzar el encuentro.
Con una jugada iniciada por Chris Paul, se encontró a Clay Thompson y Jaden McDaniels agarrándose de las camisetas y dándose empujones. El árbitro pitó y paró el partido, pero la reyerta fue a mayores y terminó con una lucha monumental sobre la pista porque Gobert, que había agarrado a McDaniels para separarlo del acto, sufrió una especie de llave a lo UFC por parte de un Draymond Green que estaba fuera de sus cabales.
El ala-pívot de los Warriors cogió al francés del cuello por la espalda con mucha fuerza y lo arrastró hacia atrás mientras jugadores, miembros de ambos banquillos y árbitros trataban de que soltara a su rival, visiblemente preocupado porque apenas podía respirar debido a esa llave de Green, más propia de las artes marciales mixtas que otra cosa.
La estrella de los Warriors es conocida por no controlar las situaciones. No es la primera vez que Green protagoniza una reyerta, ya sea con el rival o hasta un compañero de equipo.
El comportamiento de Draymond Green es difícilmente justificable y podría costarle una dura sanción teniendo en cuenta los precedentes similares que ha tenido en la liga. Al ir por Rudi Gobert de forma evidente, el pívot francés, quien también cuenta con más de un altercado en la NBA, definió lo que había hecho el de Golden State como “comportamiento de payaso”.
Además, Gobert echó más leña al fuego al señalar que ya sabía lo que iba a suceder. El center de Minnesota apuntó directamente a la ausencia de Stephen Curry, la estrella indiscutible de los Warriors, como el motivo por el que Draymond Green hizo eso: “Cada vez que Steph no juega, él no quiere jugar sin su chico, así que hace todo lo posible para ser expulsado”.
La pelea acabó con la expulsión tanto de Thompson, como de McDaniels y de Green, y en las próximas horas la NBA anunciará unas sanciones que se prevén contundentes.
