Celebridad

Salud mental al alcance de todos


Por
SANDRA
FONTANILLA* 

Es un gusto enorme poder compartir con ustedes espacios de reflexión en torno a temáticas relacionadas con el área de salud mental.

Para la Organización Mundial de la Salud (OMS), la salud mental es un estado de bienestar que permite a las personas hacer frente a los momentos de estrés en la vida, desarrollar sus habilidades para poder aprender y trabajar adecuadamente y contribuir a la mejora de la comunidad (OMS, 2022). Es decir que va mucho más allá de “estar enfermo y loco”, tiene que ver con las capacidades emocionales, psicológicas y sociales que una persona utiliza para afrontar una situación difícil, traumática pero también para conectar con el disfrute, el placer y el gozo.

La vida en sí misma invita al movimiento, al cambio, a soltar, dejar ir, a dar y recibir, a disfrutar, situaciones que en nuestro mundo emocional y mental no es tan sencillo de procesar; por tanto, tenemos que generar recursos de adaptación, esa capacidad de asimilar lo nuevo para acomodar estructuras, aceptar y así transformar hábitos y rutinas que nos faciliten integrarnos a las nuevas dinámicas.

Por ejemplo, todo esto puede ocurrir cuando muere o nace un ser querido, cuando adquirimos o perdemos un empleo, cambiamos de ciudad, se generan nuevas amistades y se pierden otras, cuando hay ruptura de relación de pareja o se inicia una, en el sin número de posibilidades de acontecimientos en la vida.

La salud mental está muy orientada a la capacidad que tenemos de gestionar las emociones ante esa diversidad de situaciones que podemos vivir.

Es frecuente creer que la gestión emocional es igual a “controlar las emociones”, siendo equivalente a: no sentir, reprimir emociones, esconderlas, no comunicarlas, guardar silencio; tanto, que desde nuestras prácticas socioculturales encontramos expresiones comunes como: “tienes que ser fuerte ¿Qué vas a resolver llorando?”, “no muestres debilidad porque te la montan”, “1,2,3, ¡Cállese! le voy a pegar pa’ que llore por algo”, “amiga estoy triste. Anda y por qué te pones así por esa bobada”, “¡Sí! hoy me he reído tanto que mejor me quedo quieta pa’ que no pase nada malo”.

Más allá de ser bueno o malo este tipo de expresiones, generan en cada persona una reacción / efecto diferente, a algunas les podrá ayudar a retomar fuerzas, pero a otras no, las puede cohibir en la expresión abierta de los sentimientos y emociones, generando en muchos corazas y resistencia para pedir ayuda en un momento de fragilidad y/o vulnerabilidad dada unas situaciones específicas de vida, que ocurren en un momento determinado.

Una persona que gestiona sus emociones, no las bloquea ni las esconde, las aprende a observar, reconocer, sentir, aceptar y a partir de ello decide qué hacer, cómo canalizar eso que siente. En este sentido, si siento rabia, culpa, miedo, tristeza no necesito fingir que estoy feliz, que me siento perfecta y divinamente, va mucho más allá de cumplir estándares sociales del “ser feliz”, del “estar siempre bien”.

Reflexiones personales: ¿Qué es para ti la salud mental? ¿Qué estrategias has utilizado para ayudarte a ti mismo ante una situación de crisis? ¿Has pedido ayuda?  Si quieres compartir alguna, sígueme en redes sociales @sandram.fontanilla y en inbox puedes dejarme inquietudes para más notas de reflexión. Hasta la próxima. Siempre en contacto. Con amor y gratitud. *Sandra Fontanilla, Terapeuta Psicoexpresiva

id: 46





Source link

Antea Morbioli

Hola soy Antea Morbioli Periodista con 2 años de experiencia en diferentes medios. Ha cubierto noticias de entretenimiento, películas, programas de televisión, celebridades, deportes, así como todo tipo de eventos culturales para MarcaHora.xyz desde 2023.

Related Articles

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Back to top button