Boxeo

Ranking de las Copas Mundiales: Las 21 ediciones en orden de peor a mejor – ESPN Deportes


Hemos disfrutado de 21 Copas del Mundo desde 1930 y, de cara a la edición 2022, hemos decidido volver a examinar y calificar a cada una de ellas. Hubo muchas discusiones y cálculos; tenemos información y razones que chocan contra el instinto y la emoción pura. Al final, hemos emergido más fuertes, más sabios y más respetuosos de las opiniones de los demás y, lo más importante, con un ranking sólido del “peor” al “mejor”.

¿Cuáles han sido esos momentos, jugadores y resultados que recordaremos eternamente mucho más que las fechas de cumpleaños y aniversarios de nuestros seres queridos? Antes que nada, les contaremos cómo lo hemos confeccionado.

Metodología

Debido a que hay tantas maneras de reaccionar ante un torneo y calificarlo, necesitábamos establecer algunas pautas. El ranking de abajo se creó siguiendo una escala de 50 puntos.

Hasta 10 puntos otorgados por:
– Grandes futbolistas
– Controversias

Hasta 5 puntos otorgados por:
– Grandes finales
– Derrotas sorpresivas
– Sede/afición
– Cantidad de goles/nivel de entusiasmo general.

Finalmente, hubo 10 puntos disponibles como puntos extra basándonos en recuerdos particularmente divertidos y en algún Factor X en general.

¿El proceso de este ranking ha sido extraño, subjetivo y basado en emociones? ¿Realmente hemos recompensado algunos torneos por haber sido controvertidos? ¿El proceso quizá no haya tenido mucho sentido en algunos aspectos? Sí, tal como siempre sucede con la Copa Mundial propiamente dicha.

21. 1930

Anfitrión: Uruguay
Final: Uruguay 4-2 Argentina
Máximo goleador: Guillermo Stabile, Argentina

Calificación: 14/50

Todos los eventos importantes tienen que arrancar en algún lado y la primera edición de la Copa Mundial no tiene una buena calificación por una serie de razones. Este ha sido el típico caso de, “intentar hacer que el torneo despegue” y con el deporte aún tan nuevo como producto global, no hubo muchos jugadores estelares de quienes hablar.

Ganaron los anfitriones y hubo un condimento extra en esos seis goles anotados en la final, que fue en sí misma una revancha de la final de los Juegos Olímpicos de 1928 (que también ganó Uruguay). Oh, y el entrenador de Uruguay, Alberto Suppici, tenía apenas 31 cuando recibió el trofeo. Pero más allá de eso, no hubo mucho dramatismo del que esperamos siempre en los eventos deportivos más importantes. Con apenas 13 equipos y sin un verdadero sentido de estado físico o nivel de talento, aún no se podía hablar de derrotas sorpresivas. Además, hubo pocos goles (70) en comparación con otros Mundiales, aunque sólo se disputaron 18 partidos.

Uruguay parecía ser un gran lugar para arrancar con esta fiesta. Seis países se ofrecieron para ser sede, cinco se retiraron y Uruguay terminó siendo el ganador por ausencia de opciones. Se jugó en tres estadios a los que el público asistió en grandes números, alrededor de 90,000 personas vieron el triunfo contra Argentina en Montevideo.

Los puntos extra son por puro “amor por el juego”: los equipos europeos (Bélgica, Francia, Rumania y Yugoslavia) llegaron en barco, mientras que el equipo de Rumania había sido definido por el recientemente nombrado Rey Carlos II apenas un mes antes de que el torneo comenzara. Oh, y Rumania además no había disputado un partido competitivo en ocho años. Todos estos elementos hacen sentir a esto como la odisea y el espectáculo que la FIFA nos intenta vender en la era moderna. — James Tyler.

20. 1934

Anfitrión: Italia
Final: Italia 2-1 Checoslovaquia (después del tiempo suplementario)
Máximo goleador: Oldrich Nejedly, Checoslovaquia

Calificación: 19/50

Con los campeones reinantes, Uruguay, boicoteando el torneo (supuestamente por el hecho de que no muchos equipos europeos habían ido a su torneo en 1930), no había equipos fuertes para derribar y poca continuidad de 1930. En vez de eso, la Copa Mundial de 1934 – la primera de muchas con una elección de sede anfitriona desacertada – es sobre todo recordada por ser una exhibición de Benito Mussolini y su gobierno fascista. Siempre revolotearon acusaciones de arbitrajes arreglados, aunque también quedó claro que quizá Italia había sido el mejor equipo del torneo.

Los checos no les facilitaron las cosas en la final. El gol de Antonin Puc les dio a los visitantes una ventaja por 1-0 en el minuto 71 antes de que Raimundo Orsi anotara el gol del empate 10 minutos más tarde. La segunda final en la Copa Mundial fue la primera en pasar al tiempo suplementario, y Angelo Schiavio anotó después de cinco minutos para darles el triunfo a los anfitriones.

Una trama secundaria conmovedora en retrospectiva: este fue el único Mundial de Matthias Sindelar. El capitán de Austria fue uno de los primeros verdaderos grandes de este deporte y ayudó a su país a quedarse con el cuarto puesto. Después de negarse a jugar en representación de la Alemania Nazi, falleció de manera sospechosa en su hogar en 1939. — Bill Connelly.

19. 1938

Anfitrión: Francia
Final: Italia 4-2 Hungría
Máximo goleador: Leônidas, Brasil

Calificación: 23/50

Este torneo quizá sea más conocido por la colisión de los deportes y la geopolítica mientras que el mundo se posaba en el umbral de la Segunda Guerra Mundial, que iniciaría de manera oficial a principios de 1939. Sin embargo, cuando la Copa Mundial entró en acción en 1938, Alemania ya había anexado a Austria – que llevó a este último a retirarse del torneo – y España no pudo participar porque todavía estaba atravesando su propia Guerra Civil.

Francia quedó como sede anfitriona prácticamente siendo la única opción ya que la FIFA había optado por una segunda competencia consecutiva en Europa y, bueno, Alemania no era una opción viable. Sin embargo, el efecto colateral ocasionó que unas cuantas naciones fuertes (más específicamente, Argentina y Uruguay) se mantuvieran al margen en señal de protesta y hubo escenas desagradables dentro del campo de juego cuando Italia, los campeones reinantes, eligió usar camisetas negras en vez de su tradicional azul en los cuartos de final contra Francia, e incluso hizo el saludo fascista al público antes de que el partido arrancara.

Rumores de que Mussolini había solicitado el cambio de uniforme e incluso enviado un mensaje motivacional al equipo revolotearon por todo el torneo, aunque eso no evitó que Italia superara a Francia, Brasil y Hungría camino a su segundo título en el que iba a ser el último torneo hasta después de finalizada la guerra.

Incluso la presencia del deslumbrante Giuseppe Meazza, quizá el mejor futbolista italiano de todos los tiempos y el hombre que le da nombre al San Siro – donde Inter Milan y AC Milan, dos equipos que Meazza representó durante su brillante carrera en el fútbol de clubes, siguen jugando – no logró tapar las “camisetas negras” y los sucesos que rodearon su triunfo. — JT.

18. 1978

Anfitrión: Argentina
Final: Argentina 3-1 Países Bajos (después del tiempo suplementario)
Máximo goleador: Mario Kempes, Argentina

Calificación: 24/50

Después de una increíble seguidilla de torneos en 1966, 1970 y 1974, este no se lució tanto por una serie de razones. En primer lugar, el poder estelar se vio reducido considerablemente debido al retiro internacional de Johan Cruyff y al hecho de que Inglaterra, la Unión Soviética y los campeones europeos, Checoslovaquia, no lograron clasificar. De todas maneras, estuvieron estrellas como el brasileño, Rivellino; el italiano, Paolo Rossi; y el escocés, Kenny Dalglish, quien le propinó una memorable derrota por 3-2 a los Países Bajos en la fase de grupos. También hubo muchos goles — 14 partidos que contaron con al menos cuatro, incluyendo la final – pero el estándar cayó un poco.

Segundo, y más importante, la controversia era intensa, y no de la que es divertida discutir en retrospectiva. Tal como había sucedido con Italia en 1934, Argentina aprovechó su oportunidad como anfitriona para promocionar su brutal gobierno. Los adversarios políticos, reales o percibidos, desaparecían en oleadas (Googlea “Las Madres de Plaza de Mayo”), y la victoria de Argentina por 6-0 ante Perú – en un partido que requería una amplia diferencia de goles para que Argentina pudiese avanzar – es una de las más sospechadas en la historia de la Copa del Mundo.

Al final, un equipo neerlandés sin Cruyff de todas maneras dio pelea hasta la final y forzó un tiempo suplementario con un gol tardío de Dick Nanninga — Rob Rensenbrink en realidad tuvo la chance de ganar el encuentro, pero pegó en el poste – y los goles de Mario Kempes y Daniel Bertoni les dieron el triunfo a los anfitriones. — BC.

17. 2018

Anfitrión: Rusia
Final: Francia 4-2 Croacia
Máximo goleador: Harry Kane, Inglaterra

Calificación: 25/50

Esta Copa Mundial prometía mucho en términos de jugadores de elite y estelares, pero en el torneo primaron los sistemas por encima de los individuos, mientras que los escuadrones más fuertes y con mayor profundidad prevalecieron por encima de los jugadores de elite rodeados de equipos promedio. Lionel Messi pudo anotar un solo gol; el croata, Luka Modric, se quedó premio al JMV del torneo y Cristiano Ronaldo (cuatro goles) vio a su plantel de Portugal eliminado en manos de Uruguay en instancias de octavos.

Al final, el equipo con más profundidad y más talentoso en su conjunto (Francia) se llevó a casa el trofeo, con los goles de Kylian Mbappé y Antoine Griezmann llevándolos directo a la gloria. (También puede haber sido la última vez que hayamos visto a Paul Pogba en su mejor momento). El equipo sólido de Croacia se benefició de un empate para enfrentarlos en la final, con ambos escuadrones haciendo un entretenido partido de seis goles.

Hubo algunas derrotas sorpresivas – México y Suecia superando a Alemania en la fase de grupos entraría dentro de esta categoría, aunque fue, lejos, el peor Mundial de la Die Mannschaft – pero muchos de los esperados gigantes avanzaron a la etapa de eliminación. También hubo un detalle importante a destacar adentro de la cancha: sólo cuatro tarjetas rojas se cobraron en todo el torneo, el número más bajo para una Copa Mundial desde 1978. Puede que creas que el avance de Croacia a la final fue una gran sorpresa, pero se pudieron beneficiar del conocimiento de sus veteranos y un generoso posicionamiento en la llave (Dinamarca, Rusia, Inglaterra).

Las principales cuestiones del torneo tuvieron lugar, como uno esperaría, fuera de la cancha, con Rusia, anfitriones del torneo, enfrentando intensas críticas con relación al respeto de los derechos humanos y hostilidades hacia la comunidad LGBTQ+, además del escándalo de los sobornos para que Rusia terminara siendo electa como sede. (El Departamento de Justicia de los Estados Unidos terminó confirmando que se encontraron pruebas de sobornos entregados a dirigentes de la FIFA a cambio de apoyar su elección como sede). — JT.

15=. 1962

Anfitrión: Chile
Final: Brasil 3-1 Checoslovaquia
Máximo goleadors: Garrincha, Brasil; Florian Albert, Hungría; Valentin Ivanov, Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas; Drazan Jerkovic, Yugoslavia; Leonel Sánchez, Chile; Vava, Brasil

Calificación: 26/50

Una increíble confluencia de talento que produjo pocos momentos memorables.

La generación de estrellas de los años 50 – los brasileños, Didi y Nilton Santos; los españoles, Paco Gento y Ferenc Puskas (habiendo cambiado su nacionalidad de la húngara) – se vio bien representada y la siguiente generación de Brasil, con Pele y Garrincha, así como la de Inglaterra, con Bobby Moore y Bobby Charlton, se hacía mayor en el momento justo. Garrincha, en particular, se transformó en un héroe nacional y se sumó a la lista de los mejores de todos los tiempos con una performance dominante. (Más notablemente, anotó dos veces en un triunfo por 3-1 ante Inglaterra en los cuartos de final). Los checos fueron una dura prueba para Brasil en la final, quedándose con la ventaja al comienzo y permaneciendo empatados de cara a los 20 minutos finales, pero un avance inevitable hizo que Brasil volviera a quedarse con el título.

Pero, de todas maneras, este Mundial es más recordado por haber sido un torneo sucio y violento, caracterizado por la “Batalla de Santiago”, un triunfo por 2-0 de Chile ante Italia que requirió de múltiples intervenciones de la policía e inspiró el sistema de las tarjetas amarilla y roja. El promedio de goles cayó, sólo se usaron cuatro estadios chilenos después de los daños que ocasionó el famoso terremoto de Valdivia en 1960 y la asistencia no fue muy buena debido a las dificultades para llegar a Chile desde Europa en ese momento. — BC.

15=. 1990

Anfitrión: Italia
Final: Alemania Occidental 1-0 Argentina
Máximo goleador: Salvatore Schillaci, Italia

Calificación: 26/50

En los papeles, hay muchos aspectos que hacen que uno se enamore de este torneo en retrospectiva. Había muchas estrellas — Roberto Baggio, Franco Baresi y Paolo Maldini con Italia; Ruud Gullit y Marco van Basten con los Países Bajos; Lothar Matthaus de Alemania Occidental; el brasileño, Romario; el argentino, Diego Maradona. Tuvimos una batalla de pesos pesados en la final, que siguió un par de definiciones por penales entre potencias (Alemania Occidental-Inglaterra, Argentina-Italia) en las semifinales. También tuvimos la increíble historia de Camerún y el delantero (y bailarín) de 38 años, Roger Milla, que dejó pasmados a Argentina y Colombia camino a los cuartos de final, y después estuvo a punto de eliminar a Inglaterra. (Que la República de Irlanda llegase a los cuartos de final también fue entretenido y único).

Incluso tuvimos la controversia de “¡eso no puede ser verdad!”, en la clasificación, cuando Chile fue sancionado después de que el arquero, Roberto Rojas, fingiera una lesión – con la ayuda de una hoja de afeitar escondida en su guante – tras una bengala lanzada desde las gradas (México también fue suspendido en los Juegos Olímpicos de 1988 y el Mundial de 1990 por incumplir los límites de edad en las competiciones juveniles, algo que le abrió la puerta a los Estados Unidos para clasificar por primera vez en 40 años).

Para cualquiera que haya mirado Italia 1990, sin embargo, deben perdurar las sensaciones positivas. Este es, generalmente, conocido como el torneo que prohibió que los jugadores le pasaran la pelota atrás a su portero – muchas esperas, muchos resultados 0-0 y 1-0. La final terminó generando mucha desconfianza. El argentino, Pedro Monzón, recibió una tarjeta roja en el minuto 65 después de una caída fingida evidente de Jurgen Klinsmann y Alemania Occidental prevaleció después de un penal de Andreas Brehme en el minuto 85. (Argentina iba a recibir otra, mucho más merecida, tarjeta roja más tarde). — JT.

14. 2010

Anfitrión: Sudáfrica
Final: España 1-0 Países Bajos (después del tiempo suplementario)
Máximo goleadors: Diego Forlán, Uruguay; Thomas Muller, Alemania; Wesley Sneijder, Países Bajos; David Villa, España

Calificación: 27/50

[sonido de vuvuzelas]

Estadísticamente, la racha dominante de España – ganaron el Campeonato de Europa en 2008 y 2012, además de la Copa Mundial de 2010 — quizá haya sido el desarrollo estilístico más influyente que el deporte jamás haya visto. Más allá de eso, sin embargo, 12 de 16 partidos de eliminación en 2010 fueron definidos por un gol o por penales. Los cuartos de final — Uruguay superó a Ghana gracias a que la mano Luis Suárez les tapó el disparo, con Asamoah Gyan fallando el penal resultante, y luego ganando en instancias de penales; Países Bajos 2-1 ante Brasil; España con un gol tardío contra Paraguay; Alemania anotando tres goles tardíos contra Argentina – quizá hayan sido los mejores de todos los torneos.

[las vuvuzelas se intensifican]

La mano de Suárez fue un momento que quedó inmortalizado, pero este torneo también nos regaló el gol que no fue de Frank Lampard en la derrota en octavos de Inglaterra contra Alemania, sin mencionar el motín de los jugadores franceses: la Federación Francesa de Fútbol envió a casa a Nicolas Anelka tras una pelea con el entrenador, Raymond Domenech, y el equipo completo no quiso ir a las prácticas, Patrice Evra perdió su estatus de capitán y Francia cayó ante Sudáfrica. (Suiza también logró una victoria sorpresiva contra España en la fase de grupos, aunque, obviamente, no terminó con la racha de España).

[las vuvuzelas pasan a ser ensordecedoras]

La final prometía mucho, pero los Países Bajos la convirtieron en un partido de fútbol americano. Cometieron 28 faltas y recibieron ocho tarjetas amarillas; Nigel de Jong se las arregló para evitar ser expulsado tras su patada de karate a Xabi Alonso en el primer tiempo. España finalmente pudo avanzar cuando Johnny Heitinga fue expulsado en el minuto 109 y Andrés Iniesta anotó en el 116. — BC.

13. 1958

Calificación: 28/50

Anfitrión: Suecia
Final: Brasil 5-2 Suecia
Máximo goleador: Just Fontaine, Francia

¿Por qué esta Copa Mundial no está mejor calificada? ¡Esta fue la primera que contó con Pele! Tenías a Garrincha, su habilidosa contraparte en el ataque brasileño, y Vava, a quien menciono para hablar de su sobrenombre (“Peito de Aco,” o “Pecho de Acero”), también fue el tan esperado primer título de Brasil y avanzaron a la gloria como el mejor equipo en Suecia ese verano, sumando a los jóvenes astros con jugadores como Nilton Santos, en ese momento con 31 años (uno de los mejores defensores de su generación). La Selecao también inició la era del planeamiento y la sumatoria de profesionales para lograr mejores resultados adentro de la cancha: el entrenador, Vicente Feola, insistió en llevar un staff numeroso a Estocolmo, incluyendo un odontólogo y un psicólogo deportivo. El doctor del equipo era responsable de elegir la base del equipo durante el Mundial, eligiendo una locación con las mejores condiciones para el traslado a las ciudades anfitrionas y las mejores instalaciones de práctica.

Hubo muchos jugadores de elite en exhibición ese verano – además de Pele y Garrincha, estaba Lev Yashin, de la Unión Soviética, el único arquero que ganó el Balón de Oro; el inglés, Bobby Charlton (una leyenda de Man United que sobrevivió al desastre aéreo de Múnich); el francés, Raymond Kopa (ganador del Balón de Oro en 1958); y el ancla del “Equipo Dorado” de Hungría, Nandor Hidegkuti. Pero ningún equipo se pudo igualar al brasileño, que ganó los tres partidos en la fase de grupos sin conceder un solo gol — Austria, Inglaterra y la Unión Soviética – antes de hacerle cinco goles a Francia en las semifinales y a Suecia en una final unilateral.

Ni siquiera la alegría del francés, Just Fontaine – quien estableció la marca del torneo en anotaciones (13 goles en cinco partidos) que sigue vigente en 2022 – ni todas las travesuras pudieron dejar de lado la idea de que este torneo se destacó por el dominio de una sola nación. — JT.

12. 1954

Calificación: 29/50

Anfitrión: Suiza
Final: Alemania Occidental 3-2 Hungría
Máximo goleador: Sandor Kocsis, Hungría

Después de que las ediciones de 1942 y 1946 fueron canceladas debido a la Segunda Guerra y algunos equipos no fueron al torneo de 1950 o estaban suspendidos, el Mundial de 1954 fue el que más equipos tuvo. Brasil era cada vez más fuerte; los campeones reinantes, Uruguay, seguían siendo increíbles; los equipos europeos estaban cargados de talento y Hungría quizá tuvo el mejor seleccionado nacional al día de la fecha. Los futuros astros de Real Madrid, Ferenc Puskas (Hungría) y Raymond Kopa (Francia) se estaban acercando a sus picos, y las estrellas brasileñas, Didi y Nilton Santos hicieron sus debuts en la Copa Mundial. Entre el talento y la impresionante cantidad total de goles — 5.4 por partido en promedio, fácilmente la mayor cantidad de todos los tiempos (Hungría también promedió 5.4) – este fue un torneo impresionante incluso antes de tener en cuenta una de las mayores derrotas sorpresivas de este deporte: La victoria de Alemania Occidental en la final, alias “El Milagro de Berna”.

Hungría había superado a Alemania Occidental por 8-3 en la fase de grupos y surgió con una ventaja por 2-0 en los primeros ocho minutos gracias a goles de Puskas y Zoltan Czibor. Pero los alemanes empataron el encuentro en el minuto 18, y en el 84 consiguieron el gol ganador gracias a Helmut Rahn. Puskas estuvo a punto de empatar el partido momentos después, pero se lo considero offside de manera controvertida.

Más controversia: los árbitros húngaros enfurecidos acusaron a los alemanes de doping porque al finalizar el partido estaban mejor que al inicio, y antes del “Milagro de Berna” vino “La Batalla de Berna”, un partido de cuartos de final en el que Hungría superó por 4-2 a Brasil y terminó con los brasileños enojados invadiendo el vestuario de los húngaros para seguir con la pelea que había iniciado adentro de la cancha. — BC.

11. 2014

Anfitrión: Brasil
Final: Alemania 1-0 Argentina (después del tiempo suplementario)
Máximo goleador: James Rodríguez, Colombia

Calificación: 30/50

Este torneo tuvo algo memorable para todos los gustos.

Goles espectaculares: Brasil 2014 tuvo al cabezazo de Robin van Persie en el partido de Países Bajos contra España; el surgimiento de James Rodríguez vs. Uruguay con Colombia y un gol técnicamente perfecto ganador del torneo del alemán, Mario Gotze, en la final.

Avances de equipos tapados: Costa Rica ganó en un grupo en el que también estaban Italia, Inglaterra y Uruguay, y después casi supera a Países Bajos en los cuartos de final antes de caer por penales.

Eliminación de los favoritos: España, equipo ganador de tres torneos importantes en fila, quedó eliminado en la fase de grupos tras caer por 5-1 ante los Países Bajos y por 2-0 ante Chile.

Controversia e intensidad: El partido de cuartos de final entre Brasil y Colombia estuvo repleto de estas cuestiones. Neymar terminó sufriendo una fractura en una vértebra tras una entrada en la espalda por parte del colombiano, Camilo Zúñiga, y no pudo jugar el resto del torneo.

La mayor sorpresa de todos los tiempos: Alemania 7-1 Brasil en la semifinal.

No fue un torneo perfecto — la final estuvo peleada pero muy cautelosa, con apenas 20 intentos en 120 minutos a pesar de contar con un talento de otro mundo en el ataque (Messi y los delanteros alemanes) – y además hubo problemas con el trato que recibieron los trabajadores de la construcción en Brasil y el traslado de miles de personas durante la construcción de los estadios. Pero adentro de la cancha, fue en su mayoría un gran torneo. — BC

10. 2002

Anfitrión: Corea del Sur y Japón
Final: Brasil 2-0 Alemania
Máximo goleador: Ronaldo, Brasil

Calificación: 31/50

Esta es una Copa Mundial difícil de adjudicar usando nuestra fórmula porque contó con la concentración más alta de jugadores superlativos — Ronaldo, Zinedine Zidane, Paolo Maldini, Thierry Henry, David Beckham, Xavi y más – pero no pudimos ver demasiado de ellos debido a una serie de derrotas sorpresivas (tanto legítimas como controvertidas) que implicaron que muchos favoritos terminasen yéndose a casa antes de los esperado. En el caso de Zidane, su participación en el Mundial terminó antes de comenzar, ya que una lesión en el cuádriceps en un amistoso pre torneo contra Corea del Sur sólo le permitió jugar el tercer partido en la fase de grupos.

La complicada diferencia de las zonas horarias para los fanáticos estadounidenses (+14 horas para las personas en la Costa Este) implicaba una noche en vela para poder ver la acción, por lo que seguramente habrán pensado que estaban en una especie de sueño. Senegal marcó el tono contra los campeones defensores franceses, que no pudieron superar la lesión de Zidane o la ausencia de Robert Pires camino a su salida en la fase de grupos. La República de Irlanda superó todas las expectativas al llegar a octavos, superando la salida antes del torneo de su capitán, Roy Keane, que tuvo una gran disputa con la Federación Irlandesa de Fútbol y le dijo al entrenador, Mick McCarthy, que “se metiera el Mundial en el –” antes de ser enviado a casa.

Íbamos a ver otras sorpresas más: Corea del Sur llegó a las semifinales, la primera nación afuera de Europa y América en lograrlo, aunque con mucha ayuda de los árbitros. En primer lugar, Byron Moreno expulsó al italiano, Francesco Totti, y les negó un gol decisivo mientras que Corea del Sur ganó por 2-1 en el tiempo suplementario — una situación tan complicada que incluso el presidente de la FIFA, Sepp Blatter, intervino pidiéndoles a los Azzurri que “mostraran algo de dignidad” en su salida a la vez que admitió que la FIFA iba a reformar su proceso de selección de árbitros de cara a futuras Copas Mundiales – y luego superó a España en instancias de penales gracias a dos goles invalidados a su favor.

Sin embargo, al final, Brasil superó a Alemania. Después de todos los fuegos artificiales a lo largo del torneo, la final fue razonablemente decepcionante.

9. 1950

Calificación: 32/50

Anfitrión: Brasil
Final: Uruguay 1-0 Brazil Uruguay 1-0 Brasil (Nota: Técnicamente, esta no fue una final, sino el partido que definió la segunda fase de grupos).
Máximo goleador: Ademir, Brasil

La Copa Mundial regresaba después de una ausencia de 12 años a causa de la Segunda Guerra Mundial, pero no contó con muchas estrellas. Alemania y Japón no pudieron participar. Tres de los 16 equipos se retiraron antes de la competencia (incluyendo Argentina); Europa del Este en su gran mayoría se negó a participar; el seleccionado italiano todavía estaba sufriendo las consecuencias del devastador accidente aéreo de Superga el año anterior, en el que el equipo completo de Torino había perdido la vida.

El torneo contó con dos de los resultados más sorprendentes en la historia del deporte. En primer lugar, un equipo estadounidense emparchado y al parecer superado por el nivel de su rival, le ganó a Inglaterra, los favoritos, por 1-0, con un gol en el minuto 38 de Joe Gaetjens. Este triunfo sirvió de inspiración para un libro y una película horrenda titulada, “El Juego de sus Vidas”, y dejó a Inglaterra afuera en la fase de grupos.

Pero en la final, fuimos testigos de una derrota aún más sorpresiva. Brasil había superado a sus primeros cinco rivales con un marcador combinado de 21-4 y sólo necesitaba un empate contra Uruguay para quedarse con el título. Delante de un público absurdo de 173,850 personas en el Maracaná de Río de Janeiro, lograron la delantera al inicio, pero goles de Pepe Schiaffino y Alcides Ghiggia en los últimos 25 minutos le dieron a Uruguay una impensada victoria. En Brasil es recordada como la “Tragedia del Maracaná” y el arquero, Moacir Barbosa, fue culpado por su responsabilidad en el arco durante décadas. — BC.

8. 1974

Calificación: 33/50

Anfitrión: Alemania Occidental
Final: Alemania Occidental 2-1 Países Bajos
Máximo goleador: Grzegorz Lato, Polonia

¿No está Pelé? ¿No hay problema? Si bien a este torneo quizá le haya faltado el drama que hubo en otras ediciones, compensó las ausencias – Inglaterra, España y México no clasificaron – con el magnífico equipo de Países Bajos, su tremenda derrota en la final y el advenimiento del “Fútbol Total”. También hubo un trofeo nuevo, el que asociamos con la Copa Mundial en estos días, mientras que los tres títulos de Brasil (hasta 1970) dieron lugar a que la FIFA les entregara de manera permanente esa copa.

Sin embargo, este torneo se centró en los neerlandeses, quizá más porque no ganaron. La manera en la que el equipo de Rinus Michels se desempeñó – un juego de asociación sin posición fija liderado por el despreocupado, Johan Cruyff – fue realmente revolucionaria y se puede ver su impacto en los equipos de Barcelona y Man City de Pep Guardiola en la era moderna. El equipo neerlandés fue una alternativa caótica y efervescente a la excelencia más estructurara de Alemania Occidental, que terminó segundo en su grupo ante Alemania Oriental para quedarse con su segundo título. (el triunfo por 1-0 fue quizá el resultado del torneo).

Siguiendo el ritmo metronómico de Franz Beckenbauer y el ataque de Paul Breitner y Gerd Muller, Alemania Occidental fue impresionante al neutralizar a los neerlandeses, que habían reemplazado a Brasil como los favoritos de los fanáticos a nivel global. Pero su reputación los precedió mientras que los medios alemanes reportaron una “pool party” días antes de la final en la que los astros de la Oranje juguetearon con mujeres – difícilmente la preparación que podrías ver en la era moderna. Lo cierto es que los informes nunca fueron confirmados, pero la distracción ayudó a desviar la atención de su estilo de juego mientras que los alemanes terminaron quedándose con el triunfo. — JT.

7. 1966

Calificación: 34/50

Anfitrión: Inglaterra
Final: Inglaterra 4-2 Alemania Occidental (después del tiempo suplementario)
Máximo goleador: Eusebio, Portugal

El mayor premio del fútbol se fue con el país en el que se inventó el deporte moderno. Inglaterra empató con Uruguay en el primer partido, pero a partir de ese momento ganó cinco al hilo, eliminando a un sobresaliente equipo de Portugal en las semifinales, y después venciendo a Alemania Occidental en una final impresionante. Los alemanes habían tomado la delantera al comienzo, empataron el encuentro después de estar abajo por 2-1, pero un hat trick de Geoff Hurst – que jugó porque el titular original, Jimmy Greaves, se había lesionado – ganó el partido para los anfitriones en el tiempo suplementario.

El torneo había sido sobresaliente incluso antes de la final. El jugador de Portugal, Eusebio, uno de los más grandes de la historia, aprovechó al máximo su única participación en el Mundial anotando nueve goles en seis partidos. Las leyendas de Inglaterra, Bobby Charlton y Bobby Moore, estuvieron en su mejor momento también, mientras que el astro de 20 años de Alemania Occidental, Franz Beckenbauer, fue uno de los jugadores más sobresalientes de la competencia en su debut en el torneo.

Después de ganar su primer partido contra Bulgaria, el dos veces campeón, Brasil, sorprendentemente quedó fuera del torneo con derrotas ante Hungría y Portugal, que después superó un difícil de 3-0 para ganarle a Corea del Norte por 5-3 en un clásico en los cuartos de final. Hasta tuvimos una dosis de controversia con un clásico “gol que quizá no debería haber sido” – de Hurst en el tiempo suplementario de la final, que quizá no cruzo completamente la línea – y una situación extraña en la que el trofeo Jules Rimet desapareció de una exhibición en marzo antes de que un perro llamado Pickles lo descubriera en un arbusto. — BC.

6. 1994

Calificación: 35/50

Anfitrión: Estados Unidos
Final: Brasil 0-0 Italia (3-2 por penales)
Máximo goleadors: Oleg Salenko, Rusia; Hristo Stoichkov, Bulgaria

Andrés Escobar, recostado de espaldas después del gol en contra en el segundo partido en la fase de grupos de Colombia contra los Estados Unidos que terminó dejándolos afuera. Roberto Baggio después de enviar al cielo su penal. La estrella del pop, Diana Ross, fallando su penal en la ceremonia de inauguración. El partido más importante del mundo (la final de una Copa Mundial) en uno de los estadios más lindos del mundo (el Rose Bowl).

En cuanto a imagen, será difícil superar 1994. Los escándalos fueron muchos, con el doping positivo de efedrina del legendario Maradona y, por supuesto, el trágico homicidio de Escobar en su regreso a Colombia.

La competencia estuvo repleta de tensión; todos los partidos de eliminación se definieron por un gol o por penales. El triunfo por 3-2 de Brasil en cuartos de final contra los neerlandeses contó con cinco goles en 28 minutos y el búlgaro, Stoichkov, se convirtió en una de las mayores estrellas del juego con un trío de goles en las rondas de eliminación, mientras que ayudó a que su equipo llegara a las semifinales de forma sorprendente.

Brasil tuvo incontables oportunidades de tomar el control en la final – Italia intentó un solo disparo en los primeros 64 minutos y siete en el partido (Brasil: 24 disparos) – pero este torneo estaba destinado a ser definido por la compostura y Baggio la perdió brevemente. Los estadounidenses que experimentaron este deporte por primera vez, pudieron apreciar la ansiedad que puede producir. — BC.

5. 1970

Calificación: 36/50

Anfitrión: México
Final: Brasil 4-1 Italia
Máximo goleador: Gerd Muller, Alemania Occidental

La primera Copa Mundial transmitida en color – y la primera vez que se usó su pelota icónica, la Adidas Telstar – dio lugar para un torneo vibrante y soleado cuyas imágenes encandilaron a todo el mundo. Fue una competencia cautivadora, capturando el triunfante final de la era Pele/Charlton/Yashin, mientras que iniciaba una nueva gracias a Alemania Occidental que nos iba a regalar más de Muller y Franz Beckenbauer en los años venideros.

Fue el primer Mundial que vino con un emblemático álbum de figuritas, ya que Panini firmó un acuerdo con la FIFA a principios de ese año, y la asombrosa Selecao -liderada por Pelé, Tostao, Jairzinho, Carlos Alberto y el elegante mediocampista de contención Clodoaldo- arrasó con todos los rivales. Brasil no sólo ganó todos los partidos de las eliminatorias, sino que hizo un perfecto seis de seis en México, con 19 goles convertidos y apenas siete permitidos, y en la final goleó 4-1 a una muy buena selección italiana.

Hubo poco dramatismo –la única controversia fue la acusación de robo contra el capitán de Inglaterra, Bobby Moore, durante un viaje a Colombia antes del torneo, que casi le cuesta el Mundial– pero muchos buenos partidos. Desde la impresionante carrera de Perú hasta los octavos de final, liderada por Teófilo Cubillas, hasta el textualmente “Partido del Siglo” (en serio, la FIFA lo llamó así), en el que Italia venció a Alemania Occidental por 4-3 en la prórroga de las semifinales, tras un 1-1 al cabo de los 90 minutos, brillaron la alegría y el disfrute.

4. 1998

Anfitrión: Francia
Final: Francia 3-0 Brasil
Máximo goleador: Davor Suker, Croacia

Calificación: 37/50

Éste fue el sexto torneo -y el más reciente- ganado por los anfitriones, pero Francia tuvo que esforzarse mucho para alzarse con su primera victoria en un Mundial.

En otro ejemplo memorable de la convergencia de la geopolítica con el deporte, la Copa Mundial siguió su curso a pesar de que se frustró un complot terrorista para atacar el partido de Inglaterra contra Túnez en Marsella, secuestrar a la selección masculina de Estados Unidos en su hotel y estrellar un avión contra una instalación nuclear en las afueras de París. Más de 100 personas fueron detenidas por su participación en el complot, financiado por Osama Bin Laden.

También fue la primera Copa Mundial con 32 equipos, lo que supuso el debut de Croacia (que se ha convertido en una parte importante de esta competición en la época moderna), Japón, Jamaica y Sudáfrica. Croacia, en particular, impresionó, aprovechando los seis goles de Davor Suker para terminar en tercer lugar, venciendo a Alemania por 3-0 en los cuartos de final y luego superando a Dennis Bergkamp y los Países Bajos en el partido por el tercer puesto.

También hubo estrellas increíbles en todo el torneo, desde un Michael Owen de 17 años que convirtió para Inglaterra hasta la generación dorada de Nigeria, con Jay Jay Okocha, Sunday Oliseh, Kanu y Celestine Babayaro, quienes impulsaron a las Súper Águilas para superar a España y terminar primeros en el Grupo D, antes de ser derrotados por Dinamarca en los octavos de final. Roberto Baggio se despidió de Italia, aunque no hubo un arco de redención tras su horrible fallo en la tanda de penales de la final de 1994; convirtió su penal contra Francia en los cuartos de final, pero la Azzurra se fue a casa antes de tiempo.

En cuanto al dramatismo, ¿quién puede olvidar Inglaterra-Argentina en los octavos de final? Owen marcó el gol del torneo, zigzagueando entre la defensa antes de disparar un remate imparable a la red de Carlos Roa. Luego llegó la patada de David Beckham a Diego Simeone delante del árbitro, por la que fue expulsado y los ingleses perdieron en la tanda de penales, como suele suceder. Beckham se convirtió en el villano de un país, pero pronto reconquistó sus corazones. Al fin y al cabo, es Becks.

¿Y el gol de Bergkamp que eliminó a Argentina en los cuartos de final, controlando con soltura un pase de casi 50 metros de Frank de Boer, deslizándose por dentro de su marcador para rematar al techo de la red en el alargue del segundo tiempo? ¿Y qué decir de la excelencia de los arqueros Fabien Barthez y José Luis Chilavert (no olvidemos que este último también se encargaba de las jugadas a pelota parada de Paraguay, y estuvo cerca con un tiro libre)?

La final también estuvo a la altura de las expectativas, tanto por lo que ocurrió en el terreno de juego -Francia se impuso por un contundente 3-0- como por lo que sucedió antes. Ronaldo, el talismán de la delantera brasileña, estuvo misteriosamente ausente de la primera lista presentada antes del partido, lo que provocó una gran confusión. Más tarde reconoció que había sido llevado al hospital el día del partido tras sufrir convulsiones en su habitación y perder brevemente el conocimiento. La situación, comprensiblemente, ensombreció los preparativos de la Selecao.

Ronaldo volvió a la plantilla unos 30 minutos más tarde, pero durante todo el partido quedó claro que algo no iba bien, ya que deambuló por la cancha sin influir en el juego. Zinedine Zidane aprovechó la mala defensa para marcar dos goles a pelota parada, ya que Brasil simplemente no apareció.

Es una pena que Zidane sea recordado únicamente por su cabezazo en la final de 2006, ya que su virtuosa actuación contra Brasil merece el mismo mérito. Como el pilar de un equipo francés que montó un intenso orgullo nacional hasta la victoria, fue tanto el Mundial de Zidane como el de Francia. — JT.

3. 2006

Anfitrión: Alemania
Final: Italia 1-1 Francia (5-3 en penales)
Máximo goleador: Miroslav Klose, Alemania

Calificación: 38/50

El coeficiente de sorpresas fue bajo, pero por lo demás, ésta fue otra Copa Mundial que nos dio un poco de todo.

Tuvimos un poco de corrupción de la vieja escuela, con fuertes acusaciones de soborno que involucraron a algunos nombres muy importantes durante el proceso de licitación.

Tuvimos una grata carrera semi inesperada de los anfitriones; la joven selección alemana de Jürgen Klinsmann venció a Argentina por penales y se quedó con el tercer puesto (aunque el éxito de Alemania nunca sorprende del todo).

Tuvimos estrellas haciendo cosas de estrellas: el francés Thierry Henry marcó el gol de la victoria sobre Brasil en los cuartos de final, Ronaldo convirtió el 15º gol de su carrera en la Copa Mundial, Zinedine Zidane anotó en la final en su último torneo internacional, Lionel Messi y Cristiano debutaron en la Copa Mundial y cada uno marcó un gol.

En la final hubo otra tanda de penales, esta vez decidida por el fallo de David Trezeguet (su remate dio en el travesaño y sobre la línea) y el gol de Fabio Grosso. Por lo demás, tuvimos una gran final, con cambios de ritmo y ambos equipos con posibilidades de ganar antes de los penales.

Y, sobre todo, tuvimos el cabezazo de Zidane al italiano Marco Materazzi en la final (y, finalmente, su estatua). — BC.

2. 1986

Anfitrión: México
Final: Argentina 3-2 Alemania Occidental
Máximo goleador: Gary Lineker, Inglaterra

Calificación: 39/50

Fue el Mundial de Diego Maradona, ¿hace falta decir más?

México tomó el relevo de Colombia, a la que la FIFA había adjudicado el torneo, pero se retiró en el invierno de 1982. Al anunciar la noticia, el presidente Belisario Betancur, citando una crisis económica en su país, dijo: “Tenemos muchas cosas por hacer aquí, y no hay tiempo suficiente para atender las extravagancias de la FIFA y sus miembros”.

Canadá, Dinamarca e Irak debutaron en la Copa Mundial y el formato del torneo se ajustó a la luz del escándalo que involucró a Austria y Alemania Occidental en la Copa Mundial anterior (más sobre eso en breve). Como resultado, los últimos partidos de la fase de grupos afortunadamente se jugaron a la misma hora para evitar más oportunidades de confabulación.

Pero sean cuales sean tus recuerdos secundarios de esta edición (muchos de ellos incluyen a personalidades como Zico, Preben Elkjaer, Michael Laudrup y Michel Platini), éste fue el Mundial de Maradona. De la misma manera que se cargó a Napoli sobre la espalda para ganar dos títulos de la Serie A, llevó a su país a la tierra prometida con una serie de actuaciones desafiantes, decadentes y brillantes, y con goles inolvidables, para ganarlo todo. Aunque no marcó contra la siempre peligrosa Alemania Occidental en la final, ante 114.000 espectadores en el legendario Estadio Azteca, su influencia fue el tema predominante del torneo. Cualquier otro jugador habría alcanzado su pico con los dos goles -la “Mano de Dios” y su virtuosa carrera en solitario a través de prácticamente todo el equipo inglés- marcados en los cuartos de final, pero Maradona todavía tenía suficiente en el tanque para hacer la asistencia ganadora en la final, dando un pase a Jorge Burruchaga para que pudiera marcar el tercer gol clave.

1. 1982

Anfitrión: España
Final: Italia 3-1 Alemania Occidental
Máximo goleador: Paolo Rossi, Italia

Calificación: 40/50

No hubo otro Mundial con más de todo que éste. El poderío de las estrellas se salió de lo normal -Sócrates, Zico y Falcao eran las estrellas de Brasil, Diego Maradona marcó su debut con dos goles y una tarjeta roja, el italiano Paolo Rossi dominó, Michel Platini condujo a Francia a las semifinales- y una serie de grandes equipos capturó la imaginación.

Brasil marcó 15 goles en cinco partidos, pero cayó por 3-2 ante Italia, con un triplete de Rossi, en un clásico de la segunda fase de grupos. Italia se mostró en su versión más defensiva y física (como podría atestiguar Maradona) durante la mayor parte del torneo. Alemania Occidental y Francia disputaron un clásico histórico en las semifinales, que ganaron los alemanes por penales tras remontar una desventaja de dos goles en la prórroga. Los pesos pesados jugaron como tales en todo momento.

La cosa no quedó ahí. Cinco equipos debutaron en la Copa Mundial (Argelia, Camerún, Honduras, Kuwait y Nueva Zelanda), y uno de ellos protagonizó una famosa sorpresa en la fase de grupos: la victoria de Argelia por 2-1 sobre Alemania Occidental. Irlanda del Norte se impuso ante España para quedar primera en el grupo, y además tuvimos una doble dosis de polémica alemana. En primer lugar, se produjo “La vergüenza de Gijón”, cuando ciertamente pareció que Austria y Alemania Occidental se pusieron de acuerdo para jugar a media marcha su último partido de la fase de grupos, con el fin de asegurar un resultado que garantizara que ambos avanzaran, eliminando a Argelia. Luego, en las semifinales, el arquero alemán Harald Schumacher no sólo dejó inconsciente al francés Patrick Battiston (con las costillas rotas, las vértebras dañadas y dos dientes menos) en una entrada, sino que además no fue sancionado por ello. Luego atajó dos veces en la posterior tanda de penales que le dio la victoria a su equipo.

Al final, el dramatismo se consumió antes de la final. Italia erró un penal en un primer tiempo sin goles, pero Rossi impulsó a los italianos en el minuto 57, y a partir de entonces se pusieron rápidamente 3-0 arriba. Pero éste fue un torneo perfecto hasta los últimos 30 minutos. — JT.



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Marc Valldeperez

Soy el administrador de marcahora.xyz y también un redactor deportivo. Apasionado por el deporte y su historia. Fanático de todas las disciplinas, especialmente el fútbol, el boxeo y las MMA. Encargado de escribir previas de muchos deportes, como boxeo, fútbol, NBA, deportes de motor y otros.

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