Stephen Curry se corona rey del triple ante Sabrina Ionescu en un duelo para el recuerdo – Relevo
Pocas veces un evento en el fin de semana del All Star ha generado tanta expectativa como este. Nunca visto, la NBA organizó un concurso de triples entre el mejor tirador de la historia, Steph Curry, y la jugadora con el récord de más tiros anotados en un concurso de triples, con 37 puntos. Se lo llevó Steph, que se proclama como el rey absoluto del triple, pese a la grandísima actuación de la jugadora de las New York Liberty. Abriendo la puerta a que mujeres compitan por la corona, que por ahora sigue en la cabeza de Steph.
Abrió el evento Sabrina Ionescu, que tomó la decisión de empezar y poner la presión sobre Steph. Y como el año pasado en el All Star de la WNBA, empezó casi perfecta para locura de la afición. Le costaron los últimos dos carros, cuando se empezó a notar el impacto de tener que tirar desde una distancia a la que no está acostumbrada. Acabó con 26, cifra que ninguno de los participantes en el concurso de triples celebrado minutos antes pudieron superar. Con esa misma marca se metieron en la final Karl-Anthony Towns, Trae Young y Damian Lillard, que la repitió para ganar el concurso. Se quedó lejos de los 37 que anotó en julio de 2023.
Y Curry sabía que marca necesitaba para conseguir el cinturón de campeón del primer concurso entre los dos, que no el último. Pero nadie puede con Curry. Metió 29, le sobró exactamente un triple, y tuvo que sacar su mejor versión para llevarse el concurso, pese a fallar los dos balones triples. Estuvo perfecto desde ambos carros en las alas y erró solo uno en el carro final, con todo balones dobles. Y competir contra el mejor tirador de la historia es muy complicado, por mucho que seas Sabrina Ionescu. Aunque fue ella la que dejó la frase de la jornada tras la derrota. “Si puedes tirar, puedes tirar. Da igual si eres un chico o una chica”.
Originalmente, Sabrina iba a lanzar desde distancia WNBA (6,75 metros) y Curry lo haría desde la línea de triple NBA, con un máximo de 7,42 metros, pero finalmente la jugadora de las New York Liberty decidió que ambos lanzarían desde la misma distancia, formato NBA, aunque sí que Sabrina usaría balón de la competición femenina. El formato fue el mismo que el del concurso de triples celebrado minutos antes: cuatro carros con cinco balones cada uno, el último con valor doble, conocido como ‘money ball’. Un quinto carro, en una posición designada por el tirador con únicamente balones dobles, y dos lanzamientos con tres puntos de valor, a casi 10 pies de distancia, conocidos como. En total, 27 triples y 70 segundos, con opción de anotar hasta 40 puntos.
Sabrina llegó a la cita como una de las estrellas de la WNBA, y siendo la líder en triples anotados de la liga y tercera en porcentaje, con 128 anotados y un 44.8% de acierto. Steph ha liderado la NBA en triples anotados ocho temporadas, incluyendo la actual, donde promedia cinco por noche con un 42.1% de eficiencia. Es el máximo anotador de triples de la historia de la NBA, con 3,640 y un 42,7% de eficiencia en su carrera. Dos de los mejores triplistas del mundo cara a cara con una buena causa de fondo. Por cada triple, la NBA donaría dinero a la fundación elegida por los dos jugadores: la de Curry, Eat.Learn.Play. Foundation; la de Ionescu, SI20 Foundation.
Un evento al que ambos llegaron con mucha expectativa. Curry tiraba balones fuera antes del concurso. “Ella es la campeona, tiene el récord, yo soy el que reta por el título, vamos a dejar claro eso” aseguraba Steph, que se llevó el concurso en 2015 y 2021. Para Sabrina, solo poder estar ahí y competir contra Curry era un sueño. “Él era mi fondo de pantalla. Solía tener pósteres en mi habitación con su foto, es un momento que no me acabo de creer, el sueño de cada niño” explicaba Ionescu. Y ya se ha abierto la puerta a una segunda edición.
