Joel Embiid tiene un plan: volver a jugar esta temporada… aunque pueda ser demasiado tarde – Relevo
Por primera vez desde la operación, Joel Embiid habló durante la tarde del jueves con la prensa. Ha sido un mes de silencio, especulaciones, de rumores sobre su presencia en los Juegos Olímpicos con el combinado estadounidense y también de muchas derrotas para Philadelphia. Y por parte de Joel Embiid nada ha cambiado. “Ese es el plan”, decía tras el entrenamiento de la franquicia, en referencia a poder volver a jugar durante esta temporada regular. Lo que será interesante de ver. Ahora mismo quedan apenas 46 días para que acabe la fase regular de la temporada NBA, Embiid lleva fuera desde el 30 de enero y no se le espera en las próximas semanas.
Fue en la derrota de los Sixers en Golden State, cuando el interior de los Warriors Jonathan Kuminga cayó sobre la pierna del camerunés al pelear un balón. Un partido que Philadelphia ya tenía virtualmente perdido y en el que Embiid se arrastró durante los primeros cuatro cuartos, antes de salir cojeando. No ha vuelto a jugar, y ha quedado automáticamente eliminado de la lucha por cualquier premio individual pese a una temporada histórica. Cuando se lesionó, el vigente MVP estaba promediando 35,3 puntos, 11,3 rebotes y 5,7 asistencias con porcentajes de acierto altísimos, y lideraba la carrera por ser el mejor jugador del año. Ahora la prioridad es otra.
“Obviamente, todo tiene que salir bien, en el sentido de estar santo y tan cerca de mi nivel como pueda, pero jugar esta temporada sigue siendo el plan” insistía Embiid. Fue intervenido el 6 de febrero, aunque los Sixers no publicaron demasiados detalles de la cirugía ni el tiempo de baja total, solo que el próximo martes sería reevaluado. Y en palabras del jugador, se está sintiendo bien sobre la rehabilitación, pero sigue sin haber un periodo estimado para su regreso. Antes de tomar la decisión de pasar por el quirófano, Embiid se reunió con cinco especialistas diferentes, y entre todos acordaron que lo mejor era operar, pero eso no cambia sus planes de verano.
Porque pese a la lesión, Joel Embiid planea estar en la convocatoria de Steve Kerr para los Juegos Olímpicos de 2024 con Estados Unidos. En las primeras listas aparece como uno de los fijos junto a nombres como Kevin Durant, Steph Curry o LeBron James, en la que es su gran oportunidad de conseguir un título colectivo, porque los Sixers ahora mismo están a una distancia sideral de la lucha por el anillo.
Sin su estrella, el equipo ha caído a la quinta posición, empatados por la séptima. Empezaron el año terceros, 23-10 antes de la lesión y operación del camerunés, y han sumado un balance de 10-15 desde entonces. O lo que es lo mismo: 26-8 con Embiid (76.5% de victorias) y 7-17 sin su estrella (28% de triunfos). La diferencia entre ser el segundo mejor récord de la NBA o uno de los seis peores de la liga. “Fue muy duro, porque estaba jugando muy bien, me estaba divirtiendo y estábamos ganando mucho, dominando” seguía Embiid, reflexionando sobre la lesión. Y tuvo palabras también para acallar los rumores que apuntaban a que jugó contra los Warriors, pese a su pésimo estado de forma, por las críticas tras perderse el duelo ante Nikola Jokic y los Nuggets esa misma semana.
“Mi mentalidad es jugar, y jugar todo lo que pueda”, empezaba Embiid su alegato de inocencia. “Por dos meses no estuve al 100%, no estaba ni cerca de eso. Y tenía la necesidad de darlo todo por el equipo, porque puedo aportar al equipo. Así que no, no cambiaría nada de lo que hecho”. El objetivo ahora mismo es claro, intentar volver antes del final de la temporada, y que no importa la situación del equipo y la posición final en la tabla de clasificación. “Quiero estar en la pista sin importar el resto. Quiero jugar lo máximo que pueda, porque solo tengo 20 años para hacerlo”. Y por eso los Sixers fueron agresivos en el mercado, apostando por Buddy Hield, Kyle Lowry y Cam Payne.
“Le dije a Nick Nurse que me gustaría estar jugando, solo por lo bien que están jugando los nuevos. Buddy, Kyle, creo que nos ayudan mucho” explicaba Joel. Pero al final, y como cada casi temporada, la realidad de los Sixers es muy simple: necesitan a Embiid para poder luchar por el anillo, y ni siquiera el MVP les asegura pasar de segunda ronda. Vuelva sano o no.
