RTVE se gasta ya en entretenimiento, casi lo mismo que en informativos. La cadena pública ha destinado a esta primera partida un 12,1% más entre 2021 y 2022, pasando de 130,3 millones de euros hasta los 146,1 millones, según la última Memoria de Servicio Público de RTVE. El gasto en informativos, por otro lado, se ha elevado apenas un 1,1% y supone un coste ya de 155,3 millones.
El aumento del gasto en entretenimiento se produce en medio de un incremento de cancelaciones de programas. De hecho, y según admitió la propia Elena Sánchez, expresidenta de RTVE desde el pasado martes cuando fue cesada por el consejo de administración, tras una pregunta parlamentaria del PP, “hemos tenido algunos grandes aciertos y otras apuestas que están resultando fallidas”.
El grupo audiovisual ha perdido 16,4 millones de euros a raíz de la cancelación de cinco de sus programas durante la temporada pasada. Entre los que han fracaso se encuentra Días de Tele, con un gasto total de 5,64 millones. Con un coste que ronda los tres millones de euros está Vamos a llevarnos bien, 3,56 millones; Plan de Tarde, 3,5 millones y Todos contra 1, 3,13 millones. Y, por último, está 10.000 días, con un coste de 609.752 euros, siendo una producción íntegramente de la cadena. “RTVE tiene un presupuesto de 1.193 millones de euros. Y en apenas un año ha gastado 200 millones en la compra de programas externos que han obtenido una audiencia ridícula del 7,8%”, alegaba la diputada popular, Carmen Riolobos.
RTVE no está viviendo ahora su mejor momento. El pasado martes, tras la reunión del consejo de administración, se destituyó a la presidenta interina, Elena Sánchez, y a su director de Contenidos, José Pablo López. Todo esto se dio en plenas negociaciones para contratar al entrevistador David Broncano.
A partir de ahora, la presencia de la Corporación será rotatoria. En el máximo órgano de la cadena pública continuará Elena Sánchez, que sigue como consejera, y con ella permanecen Ramón Colom y Concepción Cascajosa (PSOE); Jenaro Castro, Carmen Sastre y Consuelo Aparicio (PP); José Manuel Martín Medem y Roberto Lakidain (Unidas Podemos); y Juan José Baños (PNV).
Crece la deuda
La situación económica de RTVE no ha mejorado, pues su deuda bancaria se ha elevado un 56,2% en los últimos cinco años. La organización ha alegado que se debe a los impagos del IVA, que, según las últimas cuentas publicadas por la organización, asciende a 515 millones de euros. “El saldo de Hacienda Pública Deudora por IVA del cierre provisional de 2023 ha sido aproximadamente de 532 millones, con un incremento respecto al ejercicio anterior de 16 millones”, explican a este periódico fuentes cercanas a RTVE, aunque resaltan que es una cifra provisional.
La deuda bancaria ha pasado de 145,1 millones en 2018 hasta situarse en 226,7 millones a 30 de noviembre del año pasado. “Este incremento de la deuda se debe al incremento del saldo de Hacienda Pública Deudora por IVA, por las liquidaciones pendientes de devolución”, confirmó la expresidenta de la cadena pública ante otra de las preguntas parlamentaria del PP.
La Ley General de Comunicación Audiovisual, por otro lado, ha tenido consecuencias en la cifra de negocio de RTVE. “Los cambios del modelo de financiación han tenido un efecto negativo sobre los ingresos como consecuencia de la obtención de una recaudación inferior a la prevista de los nuevos prestadores de servicios de televisión, plataformas y agregación de servicios de comunicación” justificó Sánchez Caballero. Asimismo, destaca un auge en el gasto financiero a raíz de la subida de los tipos de interés, “que impiden cumplir con el objetivo de equilibrio presupuestario previsto para este año 2023”, según Sánchez.
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