Los Kansas City Chiefs vuelven a tocar el cielo y se llevan la Super Bowl – Relevo
Empezaron atacando los Niners, que apostaron por la carrera de una de sus principales estrellas. Un Christian McCaffrey que fue nombrado esta misma semana como mejor jugador ofensivo de la temporada y que a las primeras de cambio perdió el balón. Una recuperación que no pudo aprovechar Kansas, que en su primer ataque se fue de vacío en una secuencia que duró muy pocos minutos. Las defensas comenzaban imponiéndose a los ataques.
Las primeras cuatro jugadas ofensivas (dos por equipo) acabaron en nada. Ni Chiefs ni 49ers tuvieron siquiera opción de field goal (lanzamiento a palos). De hecho, el primer cuarto acabó con empate a cero. Y los primeros puntos llegaron gracias a una patada de Moody desde 55 yardas, la más lejana de la historia de la Super Bowl. Los Niners cogían una ligera ventaja en un encuentro que estaba siendo durísimo para ambos.
Se esperaba la respuesta inmediata de los Chiefs, y pese a que Mahomes soltó su brazo por fin, una pérdida de Pacheco cuando ya estaban cerca de poder conseguir un touchdown les privó de sumar los primeros puntos. Y esa acción provocó un enfado morrocotudo de Travis Kelce, que incluso se encaró con Andy Reid, su entrenador. Y eso lo aprovechó San Francisco que, con una jugada de pizarra, puso el 10-0 gracias a un touchdown de McCaffrey que posteriormente Kansas dejó en un 10-3 al descanso.
La segunda mitad comenzó con una pérdida grosera de un desdibujado Mahomes que sus rivales no pudieron aprovechar. Las defensas seguían imponiéndose y tan solo una patada de los Chiefs logró alterar el marcador a los 10 minutos de la reanudación. Además, lograba batir el récord establecido por Moody minutos antes como la más lejana de la historia de la Super Bowl. Por el medio, dos espectadores saltaron al terreno de juego, aunque por suerte no alcanzaron la zona en la que se encontraban los jugadores.
Y de repente todo cambió a dos minutos del final del tercer periodo. Los Niners lograron detener a los Chiefs, pero una patada de estos últimos para alejar el balón rebotó en el pie de un jugador de San Francisco y la posesión pasó de nuevo a Kansas apenas a 20 yardas de la zona de touchdown. Esa oportunidad no la desaprovechó Mahomes que firmó un touchdown junto a Valdes-Scantling para poner la primera ventaja a su favor en todo el partido.
El último cuarto arrancó con una acción valiente de Shanahan, el entrenador jefe de los 49ers. Pudiendo empatar con una patada sencilla cuando ya solo tenía una oportunidad, decidió jugar y arriesgar la posesión para avanzar tres yardas. Y lo consiguió. Tres jugadas después estaban celebrando un touchdown y volvían a ponerse tres arriba antes de recibir al ataque de los Chiefs con 11 minutos todavía en el cronómetro.
No fueron tan valientes los Chiefs poco después y en una situación similar, decidieron ir a por el field goal para poner el empate a cinco minutos para el final. A menos de dos para que terminase, Moody metió una patada y puso a los Niners tres arriba. Los Chiefs tenían tiempo de sobra para empatar o ganar. Todo dependía de Mahomes y de lo que pudiese hacer en Las Vegas. Y casi lo consigue, pero su equipo se conformó con el field goal y el partido se fue a la prórroga.
En en esos momentos donde aparecen las estrellas. Comenzaron atacando los 49eres, que se tuvieron que conformar con tres puntos. Y ahí le tocaba a los Chiefs. Un touchdown les daba la Super Bowl. Mahomes fue ganando yardas, superando dos momentos críticos corriendo y decidiendo la final con un pase a las manos de Hardman. Celebraba Kansas su segundo título consecutivo, el tercero en los últimos cinco años. Son una dinastía y Mahomes es su pastor.
