Lionel Messi y el ejemplo de David Beckham que debe seguir para revolucionar el futbol en Estados Unidos – Yahoo Noticias

El futbol mundial se ha sacudido gracias a la llegada de Lionel Messi al Inter Miami de la Major League Soccer (MLS). El argentino, campeón del Mundo en Qatar 2022, fue presentado de manera oficial en el DRV PNK Stadium ante una multitud que recibió festivamente al fichaje más grande de todos los tiempos para el futbol profesional de los Estados Unidos. Otro de los precursores lo esperaba ansioso: David Beckham, que no ocultó su emoción durante la ceremonia de bienvenida.

“El siguiente capítulo de nuestra historia comienza aquí. Hace diez años, cuando empecé éste viaje, soñé con traer a los mejores jugadores del mundo a Miami. Jugadores que compartieron la ambición que tenía cuando me uní a LA Galaxy para ayudar a crecer el fútbol en este país y construir un legado en este deporte que tanto amamos. Hoy ese sueño se hizo realidad. No podría estar más orgulloso de que un jugador del calibre de Leo se una a nuestro club, pero también estoy encantado de dar la bienvenida a un amigo, una persona increíble y su hermosa familia a unirse a nuestra comunidad”, expresó el exmediocampista.

El mito inglés está catalogado como el primer bombazo de la era moderna para el ‘soccer’ —en los 70 jugaron Pelé, Cruyff y Beckenbauer en la extinta North American Soccer League—. Fue en 2007 cuando llegó a Los Ángeles Galaxy proveniente del Real Madrid. Aquel movimiento tuvo referencias nebulosas: el hombre que había llegado al Madrid como un “galáctico” arribaba a Hollywood, a la galaxia angelina, como encargado de llevar el futbol a otro nivel. Tenía 32 años (le dio tiempo de volver a Europa con el Milán en 2009 y el PSG en 2013, adonde finalmente se retiró), en un momento pleno, listo para redefinir la relación del futbol con los Estados Unidos.

Después de él llegaron estrellas al por mayor. Thierry Henry, Rafael Márquez, David Villa, Andrea Pirlo, Steven Gerrard, Didier Drogba, Zlatan Ibrahimovic, Frank Lampard. La tendencia era que, cuando los días de alta exigencia en Europa empezaban a asomarse, era momento de mirar hacia la MLS, un terreno que todavía buscaba asentarse con base en la aceptación del mercado nostálgico: ver lo último que tenían para ofrecer los ídolos del ayer, antes de que se fueran para siempre.

Hoy Messi es el punto de encuentro entre todas las líneas temporales. Su pasado glorioso lo convierte en el jugador franquicia no del Inter Miami, sino de toda la MLS. Su presente, con los argumentos necesarios para mantenerse en Europa de haberlo querido, lo convierte en el foco de atención unánime. Y el futuro es el fragmento que, en apariencia, menos optimismo puede despertar. Porque ya tiene 36 años y el retiro está más cerca que nunca. Pero no hay que caer tan fácil en esa hipótesis. Messi puede ofrecer más que un simple par de años de buen nivel en el ámbito deportivo.

Su imagen atrae a todo mundo. Es un imán de atención y de aspiración. Los jugadores más jóvenes del futbol europeo entenderán que pueden brillar lejos de ahí. Y sin la exasperación ni escrutinio público al están expuestos en las grandes ciudades —ya lo dejó claro la postal de Messi en el súper, sin preocupaciones, con una vida normal como la de cualquier persona—. Ya otros jugadores jóvenes han dado el salto en el pasado, como Sebastián Giovinco de la Juventus al Toronto en 2015. Pero lo de Messi puede provocar una oleada única: que los mejores jugadores de la élite del futbol vean con buenos ojos partir a la MLS.

No es una apuesta de corto plazo. No es una moda. Es una realidad que empezó a edificar Beckham hace 16 años y que hoy encuentra la conexión perfecta con Messi. Se equivocaron quienes en 2007 pensaron que el Spice-Boy solamente iba de vacaciones a Los Ángeles. Sigue involucrado en la MLS después de tanto tiempo. Más que nunca: el motivo es la presencia de Messi en Miami. Todo está listo. Habrá que estar listo para el porvenir y las emociones que depara.

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