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Conmoción en la NFL por la muerte del legendario Larry Allen a los 52 años durante unas vacaciones familiares – infobae


El legendario Larry Allen, de 52 años, murió durante sus vacaciones familiares (Foto: AP Foto/Tim Sharp)

La NFL vive horas de profunda conmoción tras conocerse la noticia de la muerte del legendario Larry Allen mientras estaba de vacaciones en México con su familia, según confirmó la propia franquicia de los Dallas Cowboys donde brilló durante más de una década.

“Los Dallas Cowboys se entristecen al saber que Larry Allen, leyenda de los Cowboys, campeón del Super Bowl, miembro del Anillo de Honor de los Cowboys y miembro del Salón de la Fama, falleció repentinamente el domingo mientras estaba de vacaciones en México con su familia”, se limitó a aclarar la organización sin dar demasiados detalles de lo ocurrido con este ex jugador de 52 años.

Estuvo en Dallas desde 1994 hasta que en el 2006 emigró a los San Francisco 49ers para militar las últimas dos temporadas como profesional. El Hall of Fame, que le abrió sus puertas en el 2013, lo despidió como el mito que fue de este deporte y lo reconoció como “como uno de los jugadores más fuertes en la historia de la NFL”.

“La NFL está llena de atletas talentosos, pero sólo unos pocos han combinado el tamaño, la fuerza, la velocidad y la agilidad de Larry Allen. Lo que podía hacer como linemen ofensivo a menudo desafiaba la lógica y la comprensión”, lo definió el presidente del Salón de la Fama, Jim Porter. Tuvo 11 Pro Bowls, 7 selecciones All-Pro y fue seleccionado como miembro del equipo de la década tanto en 1990 como en la del 2000.

Desde Dallas elogiaron su “gran capacidad atlética y su increíble fuerza” que lo convirtió en “uno de los linemen ofensivos más respetados y consumados de la NFL”. Al mismo tiempo que aclararon: “Los arreglos y detalles del servicio conmemorativo se anunciarán en un futuro próximo”. Allen estaba casado con Janelle y tenía tres hijos (Jayla, Loriana y Larry III).

Esta verdadera gloria del deporte, quien se destacó en la NFL por su combinación de tamaño, fuerza y velocidad, fue seleccionado en la segunda ronda del Draft de 1994 por la universidad californiana de Sonoma State. Durante un partido de Monday Night Football en Nueva Orleans en 1994, Allen demostró su increíble velocidad al perseguir y placar al linebacker de los Saints, Darion Conner, evitando un touchdown, lo que dejó impresionados a los locutores Frank Gifford, Al Michaels y Dan Dierdorf.

Allen ganó notoriedad no sólo por su velocidad, sino también por su impresionante fuerza. Durante una temporada baja a principios de la década de 2000, se le conoció por ser capaz de levantar más de 700 libras, lo que le permitió dominar a sus rivales con facilidad. Además, mostró una notable versatilidad en el campo, al pasar de la posición de guardia a tackle y luego regresar a guardia, destacando en ambas posiciones con múltiples selecciones para la Pro Bowl y el equipo All-Pro.

Al inicio de su carrera, Allen fue seleccionado para la Pro Bowl como guardia entre 1995 y 1997. En 1998, cambió a la posición de tackle, siendo una vez más seleccionado para la Pro Bowl así como para el equipo All-Pro. Eventualmente, regresó a su posición original de guardia, consolidándose como uno de los mejores en su posición dentro de la historia de la NFL.

En 2019, Allen fue reconocido como uno de los siete guardias en la lista de los 100 mejores jugadores de la NFL. Este reconocimiento subraya su impacto y legado en el fútbol americano, destacando su habilidad para combinar fuerza y velocidad de manera excepcional a lo largo de su carrera.

Si bien los Cowboys seleccionaron al jugador en el draft de 1994, su aporte alcanzó su esplendor en la temporada 1995, cuando ayudó al equipo a vencer en el Super Bowl XXX a los Pittsburgh Steelers. El 11 veces seleccionado al Pro Bowl fue parte de la más reciente generación del equipo texano que ganó un trofeo Vince Lombardi. Formó parte de una ofensiva en la que brillaron históricos como Troy Aikman, Michael Irvin y Emmitt Smith, todos miembros del Salón de la Fama.

Larry Christopher Allen Jr. nació en Los Ángeles el 27 de noviembre de 1971. Desde temprana edad, recurrió al fútbol como una vía para evitar meterse en problemas mientras crecía en Compton. Durante esa etapa enfrentó múltiples desafíos: a los 10 años fue apuñalado 12 veces (cuatro en la cabeza y ocho en el hombro) mientras intentaba proteger a su hermano menor durante una pelea. Un año después, su padre abandonó a la familia, dejándolo al cuidado de su madre. Ella jugó un papel crucial al persuadir a Allen de no unirse a una pandilla y decidió mudarse al norte de California para alejarlo de los peligros asociados con los tiroteos locales.

De acuerdo con diversas fuentes, asistió a cuatro escuelas secundarias distintas en un breve período, sin llegar a graduarse de ninguna de ellas. Jugó dos años al fútbol en Butte College en Oroville (California) y posteriormente ingresó a la Universidad Estatal de Sonoma, una institución de División II en las afueras de San Francisco, donde continuó su carrera deportiva.

Durante su tercer año en la Universidad Estatal de Sonoma, los cazatalentos de la NFL notaron su potencial y le indicaron que tenía una oportunidad real de llegar al profesionalismo. Esto lo impulsó a entrenar con mayor dedicación para alcanzar el éxito en el fútbol profesional.

Larry es considerado uno de los mejores jugadores de la historia (Foto: EFE/EPA/DAN ANDERSON)
Larry es considerado uno de los mejores jugadores de la historia (Foto: EFE/EPA/DAN ANDERSON)





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Rohit Palit

Periodista deportivo y graduado en Ciencias de la Comunicación de Madrid. Cinco años de experiencia cubriendo fútbol tanto a nivel internacional como local. Más de tres años escribiendo sobre la NFL. Escritor en marcahora.xyz desde 2023.

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