El pasado domingo se acabó la temporada regular en Segunda, tras 42 largas jornadas que comenzaron allá por un lejanísimo mes de agosto. Y ahora llega el capítulo final, los emocionantes ‘playoffs’ para decidir quién acompañará a Valladolid y Leganés en el ascenso a la máxima categoría de nuestro fútbol.
Así las cosas y 23 años después de su última presencia en Primera, el Real Oviedo afronta esta promoción frente al Eibar con la intención de superar la primera ronda, plantarse en la final y tener la posibilidad de regresar a la máxima categoría. Toda la ciudad está volcada con el equipo y se apunta a un lleno histórico en el Tartiere, el cartel de ‘No hay billetes’ está próximo a ser colgado y la afición de ha movilizado como pocas veces se recuerda en la historia reciente.
El técnico Luis Carrión deberá encontrar un sustituto para la sanción de Jaime Seoane y todo hace pensar que será Luismi el elegido. El equipo será fiel a su esquema de juego habitual y Carrión podría emparejar a Luismi en el medio con Colombatto, mientras que en el ataque Sebas Moyano puede tener serias opciones de volver al once titular.
EL FACTOR CAMPO A FAVOR
Por su parte, el Eibar afronta por tercer año consecutivo los ‘playoffs’. En sus dos anteriores intentos, el conjunto armero no pudo pasar de la primera ronda y ahora quiere ser capaz de dar el primer paso para estar en la máxima categoría dentro de dos meses. Y eso pasa por apear al Oviedo en una eliminatoria en la que los de Etxeberria cuentan con la pequeña ventaja de tener a favor el factor campo y de que en un hipotético empate tras la prórroga en el partido de vuelta pasarían a la final.
Pero para que todo eso se dé tendrán que salir vivo esta tarde del Carlos Tartiere. Se vuelven a ver las caras ¡apenas seis días después del duelo de la última jornada en Ipurua!, donde el equipo de Carrión perdió pero celebró por todo lo alto su clasificación para esta promoción de ascenso. El Eibar soñaba con el ascenso directo, aunque necesitaba un triunfo del Elche en Butarque que no se dio y la realidad es que el vestuario tenía asumido desde la derrota en El Molinón que el camino para ir a Primera división iba a tener que ser el largo.
Eso sí, el equipo vasco llega mejor que en sus dos últimas participaciones. Tanto en el juego, como en resultados. En lo mental y también en lo físico. Joseba Etxeberria sólo cuenta con la baja de Jon Bautista. Recupera a Arbilla tras cumplir sanción y también a Tejero, aunque todo apunta que el madrileño arrancará desde el banquillo. Róber Correa podría ser el elegido en el lateral derecho y la principal duda afecta a la delantera: Stoichkov tiene muchas opciones de formar como ‘9’, aunque no se descarta la presencia de Sergio León.
