Kamikazes históricas: por primera vez, Argentina jugará la final del Mundial de beach handball – Olé

Al llegar a China, donde se está jugando la 10ª edición del Mundial de beach handball, los seleccionados femenino y masculino de Argentina sabían que la historia no estaba de su lado (nunca se habían clasificado ni siquiera a una semifinal). Que, para figurar entre los grandes, deberían hacerse el lugar ellos mismos. Este sábado, después de haber hecho una copa impecable -con eliminación a Brasil incluida-, las Kamikazes lo lograron: vencieron a Países Bajos por 2-1 y jugarán la final por primera vez en su historia.

La victoria del combinado albiceleste, que en la ronda anterior había despachado a las máximas campeonas (Brasil, con tres conquistas y un subcampeonato), fue doblemente festejada por cómo se dio. Lejos estuvo de ser un camino de rosas hacia la definición, y hubo que sufrirlo.

En el beach handball, la victoria en cada tiempo cuenta como un punto. El primero, por 19-14, se lo quedó Países Bajos, por lo que ya no había lugar para tropiezos. El segundo, por 27-20, terminó en manos de la Selección Argentina. Y en el shootout, una especie de tanda de penales en movimiento que definía quién seguía y quién debía conformarse con el partido por el bronce, volvió a haber victoria albiceleste por 8-6 para sellar la clasificación a la finalísima.

En medio de los festejos por el pase a la final, la guía del grupo, Leticia Brunati, volvió a ponerse el chip competitivo y les pidió un último esfuerzo a sus dirigidas: “Empezó el torneo y les dije que veníamos a ganar nueve partidos. Estemos contentas. ¿Festejemos? Un poquito. Pero mañana tenemos que salir a jugar la final del mundo. Dale, viejo, ¡dale!”.

En la final femenina del Mundial de beach handball, las Kamikazes se cruzarán con Alemania, las últimas campeonas (en 2022, en Grecia, consiguieron su primera Copa). El partido se jugará este domingo a las 7.20 y será transmitido tanto por TV, por TyC Sports, como por streaming, por TyC Sports Play.

Los varones, que también afrontaban el cuarto Mundial de su historia, no pasaron de los cuartos de final: fue derrota ante Dinamarca, el último subcampeón del mundo, con parciales de 21-16 y 18-17.