Boxeo

Slow fitness: el enfoque que tendrás que adoptar para seguir siendo constante con el gimnasio este verano – GQ Spain


Seamos honestos: ¿a alguien le gusta pasar horas entrenando bajo el calor veraniego? Nosotros creemos que no y, por ello, vamos a optar por la filosofía del Slow Fitness este año. Un enfoque que a muchos puede costar ver como efectivo, porque no nos dejará sudando a mares ni exhaustos, pero que, definitivamente será la clave para aquellos a los que le guste mantenerse constante con su rutina de entrenamiento en la época estival.

El Slow Fitness es una nueva tendencia que está surgiendo en el mundo del bienestar y que no solo tiene que ver con nuestra salud física, sino también con la mental. Consiste básicamente en adoptar una perspectiva más suave, menos estricta respecto a todo lo relacionado con el fitness. Por ello, incorpora muchas actividades de baja intensidad que, al mismo tiempo, también nos permitirán practicar mindfulness.

Esto querrá de decir que en lugar de pensar que entrenar con más frecuencia y más duro es mejor, enfocarnos en otros aspectos, como la técnica, la constancia y la conexión con nuestro cuerpo. Nos permitirá seguir manteniendo nuestro nivel de fitness, pero sin necesidad de acabar exhaustos, especialmente cuando las altas temperaturas aprietan.

Cómo podemos practicar Slow Fitness, sin perder ganancias musculares

Poner en práctica este enfoque no tiene por qué suponer perder todo nuestro progreso en el gimnasio. Esta disciplina nos permite seguir trabajando la fuerza. Simplemente lo alternaremos con otro tipo de entrenos. Tiene una gran cantidad de beneficios.

El primero es que, al centrarnos en la técnica en vez de en la intensidad, estaremos ganando fuerza funcional de una forma sana, en lugar de correr riesgos de lesionarnos. No se trata de levantar cantidades imposibles de peso, ni hacer más repeticiones en menos tiempo, sino de enfocarnos en el tempo y la técnica en cada repetición para ir ganando músculo de la forma adecuada.

Esto también es muy recomendable cuando llevamos tiempo en el gimnasio y nos vemos estancados, porque nos obliga a centrarnos en la parte excéntrica de cada ejercicio para, así, seguir progresando.

Además, al incorporar disciplinas de baja intensidad, como los estiramientos el yoga, el Pilates, el LISS o el Tai-Chi, estaremos moviéndonos incluso en nuestros días de descanso, de forma que nuestra recuperación muscular será mucho más rápida y efectiva, ayudándonos a mejorar nuestra movilidad y flexibilidad de cara a los siguientes entrenamientos.

Todo ello nos ayudará a reducir cualquier tipo de estrés que podamos sentir, porque, al reducir la frecuencia de nuestros entrenamientos de alta intensidad en favor de los de baja intensidad, nuestros niveles de cortisol se verán reducidos. De la misma forma, las prácticas de Yoga y Pilates nos proporcionarán esa sensación de bienestar físico y mental que tanta falta nos hace a veces.

Cómo sería una rutina semanal basada en el Slow Fitness

Incorporar tantas disciplinas en nuestra rutina semanal de entrenamiento puede sonar complicado pero, en realidad, no tiene por qué serlo. De hecho, la mayoría de ellas podremos practicarlas desde casa.

Estiramientos

Es el tipo de movimiento más infravalorado y, sin embargo, el que más nos ayuda. Es vital para prevenir y aliviar las agujetas y la tensión muscular. También para mejorar nuestra movilidad y flexibilidad, lo que, a la larga, nos ayudará a mejorar nuestro rendimiento en nuestros entrenamientos de fuerza.

Yoga y Pilates

Siguiendo la misma línea, practicar yoga o Pilates al menos una vez a la semana será muy efectivo para incrementar nuestras capacidades. Notaremos cómo nuestra conexión mente-músculo es cada vez mayor, siendo capaces de controlar nuestra respiración al mismo tiempo que practicamos mindfulness.

Son, además, disciplinas excelentes para fortalecer nuestros músculos con el peso de nuestro cuerpo. Trabajaremos también zonas olvidadas como el core profundo.

Entrenamiento de fuerza

Como siempre, el entrenamiento de fuerza siempre debe ser la base de todo. Eso no cambia con el Slow Fitness. Lo que es diferente es la forma de practicarlo. Podremos seguir manteniendo nuestras ganancias musculares, pero practicando cada ejercicio de forma lenta, controlada y consciente. Tendremos que practicarlo, al menos, tres veces en semana.

Entrenar en verano no es sencillo, pero podemos seguir haciéndolo siempre y cuando tengamos en cuenta las capacidades de nuestro cuerpo



Source link

Marc Valldeperez

Soy el administrador de marcahora.xyz y también un redactor deportivo. Apasionado por el deporte y su historia. Fanático de todas las disciplinas, especialmente el fútbol, el boxeo y las MMA. Encargado de escribir previas de muchos deportes, como boxeo, fútbol, NBA, deportes de motor y otros.

Related Articles

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Back to top button