Los Crashers… los incombustibles del rock salmantino – La Crónica de Salamanca

La faltan un par de conciertos –en sentido casi literal- para que los Crashers, mítico grupo salmantino, cumpla sesenta años sobre los escenarios. Sí, nuestros Beatles, Rolling Stone… comenzaron su andadura en 1965… Incluso a Hilario –el batería- le pasó como a Ringo Starr que llegó más tarde, cuando el grupo ya estaba formado.  

Allá en 1965, el grupo lo formaban Paco Montes, qué fue el creador y quién le puso el nombre. Haciendo una traducción libre, Crashers viene a significar, algo así como: ‘Golpear’, ‘Romper’… Y lo hicieron porque nunca se había escuchado algo así en Salamanca.

El grupo inicial lo formaron Paco Montes, cantante, Luis Diego, guitarra solista, Beni iglesias, guitarra rítmica, Tony Payan, batería, y Román Gasco, bajista. En estas casi seis décadas, el grupo ha sufrido algún cambio en sus integrantes y posiciones en el escenario.

Actualmente, conforman Los Crashes: Toni Castilla es el cantante y rítmico, Beni, guitarra, Hilario, batería y Román, bajista.

Hagamos un viaje en el tiempo y de repente estamos en Salamanca en 1965, donde había una docena de grupos que hacían sus pinitos en la música. Los Crashers, al igual que las demás formaciones salmantinas, tocaban en la capital –Casino, Campo de Tiro, Regio, cuando había un evento-, cabeceras de comarca y se hacían sus giras por Zamora, Ávila… “Había unos festivales en los que participábamos todos los que estábamos en Salamanca”, recuerda Román Gasco.  

El primer año de andadura de Los Crashers tocaron en la Costa del Sol, Cádiz, Málaga, Sevilla… “Ese verano fue maravillo. Tocar en el club de Marbella fue estupendo”, rememora el bajista.

Los Crashers trajeron a Salamanca lo que no se escuchaba ni en las emisoras de radio. Versionaban a Beatles, Rolling Stone, The Creedence, The Animals, Elvis, Bruno Lomas, Los Rockeros, Brincos… Tanto Paco Montes, como Toni Castilla dominaban el inglés. “Paco estaba muy metido en la música, viajaba a Londres y traía discos que todavía no habían salido en España. Estábamos muy adelantados. Era él, el que seleccionaba el repertorio”, recuerda Román Gasco.

Quizá por ello, algunos decían que se parecían a los Rolling Stone, a los Beatles… o todo lo que fuera rock and Roll. “Sacamos más canciones de Beatles que de Rolling. Eso sí, las formas de Paco eran parecidas a las de Mick Jagger. Pero nuestro repertorio era muy variado. Éramos rompedores y tuvimos nuestros detractores. Pero, fuimos pioneros y disfrutamos mucho con lo que hacíamos. Nuestras familias siempre nos apoyaron”, matiza Gasco.

Además de la música, Los Crashers también tenían su legión de seguidoras, aunque no llegaban al desmayo, pero el griterío que montaban en las actuaciones matinales en el teatro Bretón, Coliseum… era bestial. Tanto es así, que Román Gasco recuerda entre risas que no se les oía.

Hicieron buena música, tuvieron seguidoras… Pero, Los Crashers no siguieron al cien por cien la consigna de aquella época de: ‘Sexo, drogas y Rock&Roll’. “¡Fíjate tú en el año 65 qué drogas iba a haber en Salamanca! Quizá algo de cannabis. El sexo… Lo que se podía, porque estaba casi prohibido”, suelta entre carcajadas Gasco y añade que lo que más, era la música.

Los Crashers compartieron escena en la década de los sesenta en Salamanca con Banadios, Soles, Premier, Los Rejas, Melódicos, Leathers, Los Clavos… “Nos llevábamos muy bien. Había muy buen rollo entre nosotros”, comenta. A nivel nacional, con repertorio propio, solo despuntó Moby Dick, que sí tuvieron algo de repercusión en España “Ahora es más sencillo lanzar una canción en una de las plataformas como Spotify o YouTube, antes era mucho más complicado ponerla en el mercado”, puntualiza Román Gasco.

Quizá por ello, la nueva etapa de Los Crashers sea tener repertorio propio porque tienen los medios, al haber programas que ayudan, instrumentos y bastante experiencia.

Además, los clásicos están de moda. Solo hay que ver quién sigue llenado estadios, desde Bruce Springsteen, con afonía incluida, Paul McCartney que dispara la venta de entradas y si los Rolling Stone vuelven a la carretera colgarían el cartel de no hay billetes. En España, tenemos a un incombustible Raphael… “¿Por qué no vamos a hacer nosotros lo propio?”, concluye Román Gasco.

Fotografía. Ángel Holgado. Actuación de Crashers en el Liverpool.

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