El 27 de junio de 2021 seguro que es un día grabado a fuego en la memoria y el corazón de Pau Gasol, la fecha en que oficialmente se convertía en jugador de la NBA tras ser elegido en el tercer puesto por los Atlanta Hawks que lo traspasarían luego a Memphis Grizzlies.
La joven promesa azulgrana venía de ganar la Liga y la Copa del Rey ante el Madrid siendo elegido MVP con 21 años, en una campaña donde promedió 11,3 puntos y 5,2 rebotes. Viendo que estaba preparado para probar su sueño de la NBA y con el interés de varias franquicias, se declaró elegible para el draft de 2021.
Lo que sucedería luego, ni tan siquiera el espigado jugador de Sant Boi se lo podía imaginar. En la noche del draft, celebrado en el Madison Square Garden de Nueva York, Pau fue elegido en la tercera posición, convirtiéndose en el primer jugador no formado en Estados Unidos elegido en el puesto más alto del draft y el segundo español que iba a jugar en la NBA tras Fernando Martin.
De los Hawks a Memphis
La gorra con los Hawks, con la que aparece oficialmente cuando sube al estrado junto al entonces comisionado de la Liga, ya fallecido, David Stern, no sería su destino final. Gasol fue traspasado junto a Lorenzen Wright y Brevin Knight a los Memphis Grizzlies a cambio de los derechos del entonces jugador franquicia Shareef Abdur-Rahim y la elección 27 en el draft de 2001, Jamaal Tinsley.
Un cambio de destino inesperado que le llevaba a una franquicia recién llegada de Vancouver y que necesitaba echar raíces en la tierra de Elvis Presley, y qué mejor que contar con un ilusionante español que prometía mucho. Su presentación oficial llegó el 1 de octubre de 2001 con el 16 a la espalda.
Debutó ante los Detroit Pistons el 1 de noviembre de 2021 y acabaría su primera temporada como Rookie del Año gracias a una media de 17,6 puntos, 8,9 rebotes, 2,7 asistencias y 2,06 tapones en 82 partidos disputados, todos como titular. Pau, la leyenda, empezaba a forjarse.
