Cristiano Ronaldo siempre nos hizo creer que su condición de ‘superhumano’ iba a hacer alargar su carrera para siempre. Sin embargo, el tiempo no perdona a nadie; contra Eslovenia, el combinado luso coqueteó con la eliminación de la Eurocopa donde solamente un heroico Diogo Costa acabó decantando la eliminatoria.
El delantero portugués sigue siendo uno de los mejores jugadores del mundo pese a quien le pese. Ni siquiera jugar en Arabia o estar lejos de su mejor condición física han minado las ansias de Cristiano de probar que puede seguir siendo el mejor… aunque contra Eslovaquia, su equipo se topó con una realidad inevitable: seguir jugando únicamente para su estrella es, como poco, un suicidio futbolístico.
En su sexta participación en el campeonato continental –récord histórico de la competición-, Cristiano Ronaldo está encontrando en Alemania su torneo con Portugal más complicado. El astro portugués sigue sin ser capaz de anotar un tanto en esta Eurocopa, aunque no será porque no lo intente…
Cristiano Ronaldo, llorando después de fallar el penalti / Twitter
La estrella portuguesa ha disparado una media de cinco disparos por partido, más que cualquier otro jugador de su equipo. Su ansia competitiva lo hace ser el foco principal del equipo de Roberto Martínez, que sigue confiando en Cristiano a pesar de que no se encuentre en su mejor nivel ni físico ni futbolístico. Sin embargo, pocos planes parece tener más bajo la manga Portugal que el mismo de estos últimos tiempos…
Cristiano, la única solución de Portugal
Si Cristiano no es capaz de terminar todo lo que genera su equipo, Portugal es un conjunto incapaz de batir a las defensas rivales. Su única solución en ataque sigue siendo el astro portugués, una limitación remarcable que no acaba de dejar explotar el juego de los múltiples astros de los que dispone Roberto Martínez. Su presencia en el campo es, cuanto menos, un problema si el equipo sigue planteando los partidos de la misma manera.
¿Significa eso que Cristiano debería permanecer en el banquillo para mejorar el juego de Portugal? La respuesta es ambigua, aunque prescindir de uno de los mejores delanteros del mundo, incluso a día de hoy, no parece una solución suficientemente inteligente. Roberto Martínez debe ser capaz de cambiar la mentalidad de un equipo que sigue dependiendo de Cristiano Ronaldo en exceso. El delantero luso debe ser un recurso, el más preciado de todos, aunque no puede convertirse en la solución recurrente.
Parece poco probable que Portugal sea capaz de encontrar la solución a todos sus problemas en esta Eurocopa. Se trata de un proceso largo que requerirá de un cambio de mentalidad de todos los miembros de la plantilla… o de que Cristiano decide dar un paso al lado con el combinado luso. Solamente el tiempo dirá hasta dónde está dispuesto a aguantar Roberto Martínez con una selección que parece hacerse añicos con el paso de los partidos…
